Irán envía dos buques de guerra al Mediterráneo, Israel se prepara retóricamente para justificar un ataque a Irán. Una vez más un equipo del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) viaja a Teherán en busca de indicios concretos de armas nucleares. Algo incierto se cierne sobre el Oriente Próximo.
Mientras tanto, el Organismo Internacional de Energía Atómica ve claros indicios de que Teherán está desarrollando una bomba. Lo mismo opinan servicios secretos occidentales.
Occidente todavía presiona con la imposición de sanciones a Teherán – pero estos sólo provocan una respuesta desafiante: mucho antes de que el embargo petrolero de la UE entre en vigor en julio, el propio Irán anuncia impertérrito la suspensión de suministros.
Al mismo tiempo, se hacen en segundo plano esfuerzos diplomáticos para impedir que Israel, cada vez más nervioso, dé un golpe militar. El ministro británico de Exteriores, William Hague, no es el único que desaconseja a Israel atacar a Irán. Sin embargo, Hague advierte a la vez de una carrera armamentística nuclear en el Oriente Próximo si Irán consigue efectivamente obtener la bomba. El peligro de una “nueva guerra fría” sería un “desastre” para el mundo, según el británico.
¿Es inminente una nueva carrera armamentística, una nueva “guerra fría” o incluso algo más? ¿Cómo se puede mitigar el conflicto entre Israel e Irán? ¿Qué papel juegan los Estados Unidos?
¿Cuál es su opinión? Juegos peligrosos - Irán al borde de la guerra
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