Desquiciado ataque en Berlín

La consternación se impuso en Berlín al concerse el incidente que ensombreció la fiesta con que se inauguró la nueva estación central de ferrocarril de la capital alemana.: poco después de terminados los festejos, cerca de las 23 Hrs. del viernes, un joven de 16 años comenzó a agredir indiscriminadamente con arma blanca a los pasantes, en pleno centro de la capital de Alemania. 28 personas resultaron heridas, de las cuales 24 tuvieron que ser atendidas en hospitales del sector. Una de las víctimas sufrió lesiones graves, pero se encuentra ya fuera de peligro.

Sin trasfondo xenófobo

La canciller alemana, Angela Merkel, y diversas autoridades manifestaron su repudio al hecho de violencia desquiciada que, según fuentes policiales, no tuvo móviles racistas. Según la policía, el joven que protagonizó el incidente había ingerido grandes cantidades de alcohol. Aunque el chico niega ser el autor de los hechos, diversos testigos lo identificaron. Nada se sabe aún acerca de las razones concretas que lo indujeron a apuñalar sin ton ni son a la gente que caminaba por el centro y las investigaciones continúan a toda marcha.

Mientras los especialistas analizan qué fenómenos psico-sociales pueden llevar a un joven a semejantes estallidos de agresividad, en otras esferas surgen preocupaciones de otra índole: con el Mundial de fútbol a las puertas, Alemania teme por su imagen.

Seguridad para el Mundial

El vicepresidente de la bancada cristianodemócrata en el parlamento, Wolfgang Bosbach, reaccionó demandando que vuelvan a revisarse los planes de seguridad para el torneo. Según indicó en una entrevista al periódico Welt Am Sonntag, no le preocupa tanto la seguridad en los estadios, sino en las transmisiones de los partidos en pantallas gigantes al aire libre, donde se reunirá gran cantidad de gente a seguir las alternativas del Mundial. La razón es simple: a través de la venta de entradas, existen más posibilidades de controlar a las personas que entran en un estadio. En cambio, a una plaza pública puede acudir cualquiera, incluyendo hooligans.

El vicepresidente del Comité Organizador del Mundial, Horst R. Schmidt, subrayó por su parte que se está haciendo "todo lo humanamente posible" para garantizar la seguridad. El portavoz del equipo organizador, Jens Grittner, hizo notar además que durante el desarrollo del Mundial se incrementarán notablemente las medidas preventivas. Por ejemplo, está contemplado llevar a cabo controles de identidad, revisar bolsos y, de haber sospechas, también registrar a las personas. En suma, en Alemania habrá un despliegue de seguridad sin precedentes, como lo confirmó la propia canciller Merkel.