1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Greenpeace apela prisión preventiva de activistas en Rusia

27 de septiembre de 2013

Greenpeace apeló la decisión de un juez de poner en prisión preventiva a al menos 22 de los tripulantes de su barco "Arctic Sunrise" en Rusia, anunció el abogado Anton Benislavski.

https://p.dw.com/p/19pY5
Imagen: picture-alliance/dpa

La actuación de la Justicia va en contra de la ley, argumentó Benislavski, citado por la agencia Interfax. Por su parte, su compañero Daniel Simmons aseguró que las acusaciones no tienen fundamento. Tras la protesta contra una plataforma petrolera en el Ártico, las autoridades investigan contra 30 miembros de Greenpeace por piratería organizada, delito para el que la ley prevé hasta 15 años de cárcel.

El tribunal que trata el caso en la ciudad de Murmansk argumentó que hay peligro de fuga, de que se repitan acciones delictivas y de destrucción de pruebas, y por eso envió a los activistas a la cárcel. Este domingo se decidirá si los otro ocho tripulantes también se quedan en prisión.

Críticas

Activistas de derechos humanos y periodistas rusos criticaron el fallo. "No hay ningún motivo para ordenar la prisión preventiva" durante dos meses, dijo el conocido activista Lev Ponomariov. Causó indignación en especial el caso del fotógrafo ruso Denis Sinyakov, que fue contratado por Greenpeace para documentar la acción, pero que no forma parte de la organización.

Como reacción al hecho de que permanezca detenido pese a ser un trabajador freelance, sus compañeros dejaron en negro las fotos hoy en varios portales rusos. Reporteros Sin Fronteras y la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) exigen la liberación de Sinyakov.

Causó indignación especial el caso del fotógrafo ruso Denis Sinyakov, contratado por Greenpeace para documentar la acción.
Causó indignación especial el caso del fotógrafo ruso Denis Sinyakov, contratado por Greenpeace para documentar la acción.Imagen: Reuters

El "Arctic Sunrise" se manifestó hace más de una semana en una plataforma petrolera de la empresa Gazprom. Las fuerzas de seguridad impidieron un intento de los activistas de trepar a la plataforma con cuerdas y abordaron el barco. La justicia acusa a Greenpeace de haber podido provocar una catástrofe ecológica con su acción. Según el diario "Isvestia", las autoridades se están planteando confiscar el buque.

La empresa rusa estatal Rosneft, que también buscará petróleo en el Ártico, pidió contención a los ecologistas. "No nos metemos en su trabajo, y les pedimos que tampoco se metan en el nuestro", afirmó el jefe de Rosneft, Igor Sechin. "Cumplimos con los máximos estándares medioambientales", añadió el que es considerado un cercano aliado del presidente Vladimir Putin.

rml (dpa, dradio)