1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

La fuerza de la vida: la historia de Sara Rus

9 de octubre de 2010

Deutsche Welle habló con Eva Eisenstaedt, autora de “Sobrevivir dos veces”, la historia de Sara Rus, una sobreviviente del Holocausto cuyo hijo fue desaparecido y asesinado durante la dictadura militar en Argentina.

https://p.dw.com/p/Pa67
La escritora argentina Eva Eisenstaedt.Imagen: COFRA

En su libro “Sobrevivir dos veces - De Auschwitz a Madres de Plaza de Mayo ” Eva Eisenstaedt relata la historia de Sara Rus, una mujer polaca sobreviviente del Holocausto que emigra a la Argentina para iniciar una vida mejor. Allí pierde a su hijo, Daniel, que es detenido desaparecido durante la dictadura militar de 1976-1983. La fuerza de Sara Rus ante la adversidad la llevó a seguir luchando por la vida a pesar de las circunstancias doblemente trágicas a las que tuvo que enfrentarse. Hoy, Sara Rus es parte de las Madres de Plaza de Mayo y participa de la Asociación de Sobrevivientes de la persecución nazi.

Deutsche Welle: ¿Cuál es el tema central de su libro “Sobrevivir dos veces”, que se ha traducido al alemán y se publicó en la editorial austriaca Mandelbaum y que se presenta ahora en la Feria del Libro de Frankfurt? ¿Por qué eligió contar la historia de Sara Rus?

Yo trabajo en el estudio de un abogado, José Moskovitz, que hace más de 40 años se dedica a las indemnizaciones de los sobrevivientes del Holocausto. Sara Rus es asidua visitante nuestra y hemos hecho trámites para ella. Lo que me llamó la atención de su increíble personalidad es que, además de todo lo que había vivido, se estaba callando el tema de la desaparición de su hijo Daniel. Esta es una doble historia, para mí tan dramática y tan original, ya que no he podido encontrar a nadie que pasara por dos situaciones semejantes: ser liberada en el campo de concentración de Mauthausen y que le desaparecieran un hijo durante la dictadura militar argentina. Así, decidí ofrecerle escribir el libro contando su historia.

¿Es posible superar el horror del terrorismo de Estado y seguir viviendo?

Se sigue viviendo. Creo que hay dos aspectos: uno son sus enormes ganas de vivir. Ella se recupera de lo que vivió en el campo de concentración, y tuvo la suerte de sobrevivir con su madre y con su pareja, que conocía de cuando estuvieron ambos en el Ghetto de Lodz. Luego, esta situación que se repite de alguna manera, y tan terriblemente en Argentina fue para ella una decepción enorme, ya que tenía todas sus esperanzas puestas en la Argentina. Se sobrevive, pero con la lucha y la búsqueda. La búsqueda de la verdad, de la justicia, y apoyándose en la memoria. De esto viven estas personas.

¿Qué queda por hacer en Argentina para esclarecer los crímenes cometidos por la dictadura militar y para preservar la memoria de estos hechos para que no se repitan?

Estamos pasando por un momento excepcional, a mi entender. Los últimos dos gobiernos se han dedicado específicamente a trabajar sobre la crueldad del terrorismo de Estado. Es así que tenemos, tal vez, el orgullo, y, como escuché ayer en una mesa redonda (en Frankfurt), el modelo de la Argentina, donde se están juzgando a los malhechores, a aquellos que han cometido estos crímenes de lesa humanidad. Queda mucho por hacer. Que se siga trabajando por juzgarlos. Que se trabaje en la educación. Es en las escuelas y en la sociedad en general donde se debe seguir hablando de este tema y que no se lo oculte, porque sólo eso nos va a ayudar a recuperar la dignidad de los seres humanos: que se sepa qué es lo que pasó en nuestro país.

¿Qué efecto producen en la sociedad, en su opinión, los juicios que se están realizando a lo largo y a lo ancho del territorio argentino a los responsables de crímenes de lesa humanidad?

Por suerte, la sociedad está tomando conciencia. Creo que debería estar hablándose mucho más, pero es mucho lo que se está haciendo. Son los medios los que pueden ayudar. Lamentablemente no todos los medios desarrollan esta temática con la intensidad con que se debiera. Pero es cada vez más la gente joven la que se interesa por seguir lo que está pasando en los juicios, y acompañan a aquellos que siguen en la búsqueda de la verdad.

En Argentina aún está abierto el debate sobre si debe someterse o no a pruebas de ADN a supuestos hijos o nietos de desaparecidos para confirmar su identidad, ya que la extracción compulsiva de muestras biológicas de pelo, sangre o saliva sería una violación a la integridad personal y afectaría los lazos familiares? ¿Qué piensa acerca de esto?

Es cierto que es un debate abierto, pero, en realidad, habría que considerar lo siguiente: en Argentina hay una ley que ampara la creación del banco de datos genéticos, la Ley 23511. Para, a partir de ese banco, almacenar datos para la información y para que se facilite el esclarecimiento de todo lo que se refiere a los conflictos relativos a la filiación. A partir de estos datos, se requieren informes, estudios, se hacen investigaciones y dictámenes. El examen genético, en el caso de aquellos que están el exterior, por ejemplo, es valorado por un juez, y de la misma manera se está analizando con suma delicadeza y con absoluto cuidado todo lo que se refiere a la extracción del ADN. Hay un derecho a la identidad. En la Declaración de los Derechos del Niño, los artículos 7 y 11 se refieren al derecho a la identidad del niño. No debemos olvidar que hay abuelas que están buscando a sus nietos, que tiene derecho a saber la verdad. Que hay niños que tiene derecho a conocer su verdad y a que no se ocultada. Y hay una sociedad que reclama. Entonces, esa misma ley propone que, en caso de haber una resistencia para conocer esta verdad, hay métodos alternativos para conocer la identidad a través del ADN.

¿Cuál es el rol de las Madres de Plaza de Mayo en cuanto a no dejar que se olvide lo que sucedió durante la dictadura en Argentina?

Creo que el rol de las Mades es fundamental, así como el de las Abuelas. Las Madres de Plaza de Mayo comenzaron a reunirse desde la desesperación. Y soy una convencida de que es a través del grupo de personas que se sostiene a cada uno de los individuos. A partir de allí lograron construir esta búsqueda en la que aún persisten. No hay que olvidar que las Madres siguen haciendo su ronda los jueves a las tres de la tarde en la Plaza de Mayo. Estas madres son emblemáticas, son un ejemplo para el mundo entero. Las madres de Guatemala, las madres de Chile se apoyan en esta idea de las Madres de Plaza de Mayo. Son fundamentales. Y como las Madres ya son ancianas, están dejándoles la posta a los hijos, que se agruparon para también continuar en esta búsqueda por la justicia, la verdad y la memoria.

Autora: Cristina Papaleo
Editor: José Ospina Valencia