La situación en Atenas está fuera de control
8 de diciembre de 2008
Unos 4.000 anarquistas han tomado el centro de Atenas, destruyendo, según informa la prensa griega, cuanto encontraron a su paso. Prácticamente todos los locales de las tres principales calles comerciales Panepistimiou, Stadiou y Skoufa, así como en el área de Syntagma, han sido quemados.
Caída la noche, los manifestantes llegaron a la zona de Kolonaki, donde viven muchos políticos, y asaltaron allí tiendas, bancos y otros inmuebles. Los transeúntes huyeron en distintas direcciones, atacados por el pánico.
Para dispersar a los manifestantes, la policía utilizó gases lacrimógenos en forma masiva, pero el método ya no surte efecto. Los bomberos se vieron impedidos en su tarea por las bombas molotov.
El primer ministro griego, Kostas Karamanlis, ha convocado una reunión extraordinaria del Consejo de Ministros, que se celebrará el martes a primera hora de la mañana con la presencia del presidente, Karolos Papoulias, y los dirigentes de los distintos partidos.
En Atenas se especula con que se declarará el estado de excepción en todo el país.
La muerte de un escolar, el detonante
Tras la muerte de un muchacho de 15 años por el presunto disparo de un policía, los disturbios irrumpieron en Grecia el sábado por la noche.
Las imágenes de las calles en Atenas y en la ciudad de Tesalónica, en el norte del país, ofrecían un aspecto devastador. Más de 500 emplados de la capital comenzaron esta mañana a retirar los restos de coches y demás objetos incendiados, y tendrán que repetir la mañana próxima de nuevo el ritual.
¿Accidente u homicidio?
El policía de 37 años, presunto autor del disparo que acabó con la vida del adolescente, declaró que había realizado tres disparos de advertencia y que uno de ellos se desvió y dio al muchacho.
Antes un grupo de manifestantes había lanzado piedras contra el coche patrulla en el que se encontraban él y un compañero. La fiscalía acusa al policía de homicidio y también ha implicado a su colega en la acusación. Los funcionarios se encuentran en prisión preventiva.
Según los testigos, se produjo un enfrentamiento verbal entre los izquierdistas y los policías en el coche patrulla. Posteriormente el policía abrió fuego directamente contra el joven. "Fue un asesinato a sangre fría", dijo un testigo en declaraciones a la radio.
¿Violación del Estado de derecho?
El presidente de Grecia, Karolos Papoulias, ha criticado veladamente el proceder de las fuerzas del orden y dijo que el Estado de derecho había sido infringido con estos acontecimientos.
El ministro del Interior, Prokopis Pavlopoulos, rechazó conclusiones precipitadas sobre culpas y declaró: "Vamos a esperar a los resultados de la autopsia". El ministro aseguró que los responsables comparecerán ante la Justicia, mientras que el primer ministro, Kostas Karamanlis, expresó sus condolencias a la familia de la víctima. Rechazó sin embargo la renuncia que había presentado el ministro del Interior.
Varios miles de izquierdistas y simpatizantes con organizaciones de izquierda habían salido el domingo a la calle para manifestarse contra el trágico incidente. "Asesino, asesino", corearon durante la manifestación cuando se acercaban a la sede de la policía en Atenas, informó la televisión.
Desde hace años, activistas de izquierda atacan a la policía, incendian filiales de bancos y vehículos en el centro de Atenas.