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Las nuevas potencias

DW-WORLD/PK30 de julio de 2008

Los comentaristas analizan el fracaso de las negociaciones de Ginebra para abatir barreras comerciales.

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Conferencia de la OMC en Ginebra.Imagen: AP

Las coordenadas de poder han cambiado


LA STAMPA, Turín: No será posible verificar si la cifra es cierta: un éxito de la Ronda de Doha habría traído aparentemente al mundo beneficios por 100.000 millones de dólares. Las negociaciones par derribar las barreras al comercia global fueron suspendidas. El forcejeo entre EE UU por un lado y China e India por otro detuvo el reloj nueve días después de comenzadas las conversaciones. Los países emergentes no tendrán un acceso más fácil a los mercados de los países industrializados, que deberán seguir pagando aranceles para poder vender mercaderías allí. Mientras Pekín y Nueva Delhi se han transformado en capitales de imperios económicos, los EE UU han perdido brillo. Las coordenadas de poder han cambiado.


Una guerra comercial


DE MORGEN, Bruselas: "La Ronda de Doha, que ya lleva siete años, se transforma cada vez más en una guerra comercial entre los países en desarrollo y los industrializados. La agricultura y la industria de los países industrializados se hallan desde hace años bajo la presión del grupo BRIC (Brasil, Rusia, India, China), y también de Sudáfrica y México. Los EE UU y Europa intentan salvarse con el sector de servicios y exigen un mayor acceso a los mercados en países de rápido crecimiento, como India y China. Se trata de servicios en los que esos países tienen aún un cierto déficit: salud, seguros y educación."


No habrá consecuencias inmediatas


CORRIERE DELLA SERA, Milán: "Las ansias de ser tenidos en cuenta a nivel mundial ha sacado de quicio los viejos equilibrios. El fracaso en Ginebra de la Ronda de Doha no tendrá sin embargo consecuencias inmediatas para el comercio. Éste ha crecido en los últimos años, también sin acuerdo. En vista de las grandes turbulencias económicas actuales, lo que menos necesita el mundo es, sin embargo, una prueba de ese tipo de la incapacidad de los políticos para ordenar los mercados a nivel supranacional. La polifacética situación actual y los peligros que amenazan a la economía mundial exigen mayor cooperación entre los gobiernos, para intentar reducir los desequilibrios, que se reflejan en los mercados."