1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

OMC: Kenia pide trato más justo para países pobres

15 de diciembre de 2015

Estados africanos, India y China reclaman a los países más ricos que eliminen las subvenciones agrarias y ofrezcan un trato más justo a las naciones en desarrollo. Kenyatta pide la liberalización del comercio mundial.

https://p.dw.com/p/1HNvs
Kenia WTO Treffen in Nairobi
De izq. a der.: la ministra de Exteriores de Kenia, Amina Mohamed, la presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf, el presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, y el director general de la OMC, Roberto Azevedo.Imagen: picture-alliance/dpa/D. Irungu

El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, instó hoy (15.12.2015) a los países más ricos a que eliminen las subvenciones agrarias y ofrezcan un trato más justo a las naciones en desarrollo, en la inauguración de la décima reunión ministerial de la Organización Mundial del Comercio (OMC) en Nairobi, la capital del país. Los Estados africanos, la India y China entienden que las ayudas a la exportación que Estados Unidos, la Unión Europea, Noruega y Suiza entregan a sus agricultores les dejan en peores condiciones para competir en el mercado mundial.

Kenyatta pidió a los países industrializados y a las naciones en desarrollo que superen los conflictos de intereses y avancen en un sistema global para la liberalización del comercio mundial. El mandatario consideró que todos los países, pero especialmente los más pobres, se beneficiarían del mayor crecimiento que podría generar el fortalecimiento del comercio mundial.

“Celebrar este encuentro en África es una oportunidad para subrayar el gran potencial de este continente y el liderazgo de los países menos desarrollados”, resaltó el presidente de Kenia. Kenyatta abanderó así el grupo de los denominados Países Menos Desarrollados (PMD) de la OMC, copado por economías subsaharianas que apenas representan el 2 por ciento del comercio mundial y que durante estos días pelearán acuerdos para desbloquear su acceso al mercado global.

Las deliberaciones iniciadas en la capital keniana, cuando la institución cumple veinte años de historia, abren dos caminos divergentes: avanzar en el proceso de liberalización iniciado en la Ronda de Doha en 2001 o admitir que la OMC no funciona como herramienta de negociación.

La primera reunión de este tipo que se lleva a cabo al sur del Sahara se ve empañada por las posiciones enfrentadas que llevan, por un lado Estados Unidos y la Unión Europea (UE), y por otro lado países emergentes como China o India. Y es que mientras Estados Unidos y la UE quieren que las economías emergentes no sigan demandando condiciones preferenciales de comercio que originalmente estaban previstas para impulsar el desarrollo en los países más pobres, países como China o India se oponen a esta idea y demandan que la ronda Doha continúe pese a la falta de avances.

Kenia WTO Treffen in Nairobi
Azevedo: "Si salimos de Nairobi con una renovada confianza y visión para el futuro, será un gran acuerdo".Imagen: Reuters/N. Kharmis

Sin avances

El director general de la Organización Mundial de Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, admitió que la institución no pudo lograr avances en la Ronda de Doha para la liberalización del comercio mundial, pese a los años que se lleva negociando. De todas formas, dijo estar convencido de que en Nairobi al menos podrán lograrse acuerdos en algunos sectores.

El objetivo del encuentro de cuatro días es desbloquear estas negociaciones, aunque los expertos creen que hay pocas posibilidades de que los 162 países miembros de la OMC logren avances concretos.

La ronda de Doha fue lanzada en 2001 con el objetivo de liberalizar el comercio mundial y alentar el crecimiento de los países en desarrollo. Estados Unidos quiere poner fin a las negociaciones de Doha y reorganizar la OMC.

Kenyatta se refirió a su vez al éxito de la cumbre climática de París y dijo que demuestra que las negociaciones multilaterales pueden dar resultados incluso cuando hay grandes divergencias. Por eso instó a los países de la OMC a seguir el ejemplo de París.

JC (dpa, EFE)