Participación moderada en elecciones francesas
22 de abril de 2012
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, que busca la reelección, acudió a votar en el distrito 16 de París acompañado por su mujer Carla Bruni-Sarkozy. Depositó su voto en el local electoral situado cerca de la casa de la pareja y no hizo declaraciones a los medios.
Las encuestas lo sitúan por detrás del candidato socialista y favorito, François Hollande, y también lo dan como perdedor en una posible segunda vuelta, a celebrarse el 6 de mayo. De cumplirse estos pronósticos, Sarkozy se convertiría en el primer presidente francés desde Valery Giscard d'Estaing, en 1981, que no gana un segundo mandato.
Hollande votó en la ciudad de Tulle, en su feudo rural de Correze. En declaraciones a la prensa consideró que se trata de un "momento importante" y se mostró "sobre todo respetuoso" con los deseos el pueblo francés. El candidato del partido socialista es miembro del parlamento en representación de Correze y preside el consejo general regional. Hollande acudió a votar acompañado de su pareja, Valerie Trierweiler.
Esquiva mayoría absoluta
Diez candidatos aspiran a la presidencia, aunque no se espera que alguno logre más del 50 por ciento de los votos necesarios para salir elegido en la primera vuelta. Todo indica que será necesaria una segunda ronda el próximo 6 de mayo, a la que concurrirán los dos candidatos más votados hoy.
En la primera vuelta, los sondeos otorgan entre el 27,5 y el 30 por ciento del apoyo a Hollande, frente al 25-27 por ciento para Sarkozy, el 14-17 para la líder del ultraderechista Frente Nacional, Marine Le Pen, y el 12-14,5 por ciento para el candidato del Frente Izquierda Jean-Luc Mélenchon.
El centrista ex ministro de Educación François Bayrou fue el primero de los diez candidatos en votar. El político de 60 años, al que las encuestas otorgan alrededor del 10 por ciento de los apoyos, puede ser clave para decidir la segunda vuelta, aunque aún no ha revelado para quién pediría el apoyo de sus seguidores.
En torno al 25 por ciento de los votantes afirmaron que quizá no votarían, tras una deslucida campaña en la que los candidatos fueron criticados por no logar tematizar lo suficiente la crisis del mercado laboral y el creciente poder de los mercados financieros. (dpa)
Editora: Emilia Rojas