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Preocupa a Italia y Alemania fortaleza del euro

3 de octubre de 2007
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El primer ministro italiano, Romano Prodi, dijo el miércoles que estaba preocupado por la fortaleza del euro y que había hablado largo y tendido sobre el tema con la canciller alemana, Angela Merkel, que le mostró también su preocupación.

Funcionarios europeos han mostrado su creciente pesar en las últimas semanas a medida que el euro alcanzaba nuevos máximos contra el dólar.

Se espera que intenten consensuar un texto nuevo más claro sobre el asunto cuando el Grupo de los Siete países más desarrollados (G7) se reúna en Washington este mes.

La política estadounidense sobre el dólar es "muy obsequiosa con los intereses nacionales", dijo Prodi en una reunión de periodistas extranjeros.

La ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, dijo en una entrevista el martes que le gustaría "escuchar de nuevo a Henry Paulson (secretario del Tesoro de Estados Unidos) decir alto y claro que un dólar fuerte es bueno para la economía estadounidense".

Italia parece estar en el G7 del lado de Francia, que ha sido la más clara al pedir un euro más débil.

Sin embargo, Gran Bretaña se ha distanciado y la posición de Alemania no ha sido muy clara.

También el principal grupo de empleadores de Europa expresó su preocupación sobre la fortaleza del euro, al instar a los gobiernos europeos que presionen a Estados Unidos, China y Japón para que tomen medidas destinadas a fortalecer sus monedas.

"Después de cruzar (el nivel de) 1,40 contra el dólar, y apreciarse contra el yuan chino y el yen japonés, el tipo de cambio del euro ha llegado a un umbral de dolor para las compañías europeas", dijo Ernest-Antoine Seilliere, presidente de BusinessEurope, en una carta dirigida al presidente del grupo de ministros de Finanzas de la región, Jean-Claude Juncker.

Por su parte, Prodi agregó que la autonomía del Banco Central Europeo debería respetarse, pero esta autonomía había de ser contrarrestada por una "política económica europea", que aún falta.