Sin pronta solución, la crisis de gobierno en Bélgica

El rey Alberto II de Bélgica alberga pocas esperanzas de una rápida solución de la crisis de gobierno. El jefe de Estado aceptó el lunes la dimisión del gobierno presidido por Yves Leterme y encargó al ex primer ministro Wilfried Martens, de 72 años, sondear la formación de un nuevo gabinete. De este modo arranca un largo proceso de búsqueda de un nuevo Ejecutivo que estaría a cargo del gobierno hasta que se celebren elecciones anticipadas, probablemente en junio de 2009. Leterme presentó el viernes la renuncia en bloque de su gobierno tras ser acusado de haber influido en la decisión de los jueces que dirimían sobre la venta del banco Fortis a la entidad francesa BNP Paribas. El político demócrata cristiano negó de nuevo la acusación después de que el rey aceptase su dimisión: "He trabajado para el bien público". E insistió en que "en ningún momento" quiso "influir el curso de la Justicia ni tampoco obstaculizarla". No obstante, hasta que Martens conforme un nuevo gabinete, Leterme seguirá al frente del gobierno. Con Martens, que pasa ahora a ser el principal mediador entre los partidos políticos y los políticos, regresa una de las figuras políticas más respetadas y con mayor trayectoria del país.