Tres buenas noticias

Un milagro increíble

PARIS-NORMADIE, Ruán: "Ingrid Betancourt recuperó su libertad. Ésa es la primera buena noticia. Un milagro en el que ya no creíamos. (…) La segunda buena noticia es que esa liberación por lo visto no fue el resultado de tejemanejes. (…) Y la tercera buena noticia es que la liberación no fue obra de Hugo Chávez. El presidente venezolano, que hace algunos meses organizó un show para el rescate de los rehenes –filmado por director Oliver Stone—no logrará obtener beneficios de la liberación de los rehenes.

Una banda de narcotraficantes

LIBERATION, París: "La rehén colombo-francesa es el trágico símbolo de la guerra que carcome a su país. (…) El presidente colombiano, Uribe, lleva adelante una guerra sin cuartel contra la guerrilla marxista, que ha abandonado sus objetivos políticos y se ha transformado en una banda de extorsionadores, secuestradores y narcotraficantes. Esa guerra ha sido la base de su éxito político. Su posición es apoyada irrestrictamente por los colombianos. (…) Luego de la liberación, Uribe puede hacer valer ahora que su línea dura es la correcta, ya que al fin y al cabo fueron las FF. AA. las que liberaron a Ingrid Betancourt.

Demasiado perfecta

LA REPUBBLICA, Roma: "La liberación de los tres norteamericanos y Betancourt es la más reciente victoriosa acción en la lucha de Uribe contra las FARC. Desde que, el 1 de marzo, Raúl Reyes fue matado en su campamento en Ecuador en el transcurso de una operación de las FF. AA. de Colombia, las FARC han experimentado sólo derrotas. Pero la acción de ayer da la impresión de haber sido demasiado perfecta. Algo no concuerda. ¿Tuvo lugar la liberación efectivamente en las últimas horas o hace ya algún tiempo? La Ingrid Betancourt que vimos bajar del avión se veía completamente diferente a la exhausta mujer del vídeo difundido por las FARC hace algunos meses. Quizás hayan sido los pantalones demasiado grandes o el enorme chaleco, pero Ingrid se veía en buen estado físico, sonriente y alegre. Pero no sonriente y alegre como alguien que acaba de ser liberado y que, debido al rápido cambio de escena, aún se ve algo confundido."

Un poderoso símbolo

IL MESSAGERO, Roma: "Una mujer brillante, educada, profundamente religiosa. Una mujer que luchaba contra la corrupción y los narcotraficantes, una Juana de Arco, a la que más de mil ciudades del mundo le han ofrecido la ciudadanía de honor. Pero también una mujer excesivamente segura de sí misma, tan tozuda que incluso confundía a sus propios seguidores. Ésa era la senadora y candidata a la presidencia Ingrid Betancourt el día que la secuestraron. Luego de haber sido hecho prisionera, fue trasladada de campamento en campamento, a pesar de que su estado de salud empeoraba permanentemente. Pero se había transformado en un símbolo y los rebeldes querían conservarla a toda costa como un símbolo, para utilizarla como pieza de ajedrez en futuras negociaciones. Ingrid Betancourt ya no será la candidata a la presidencia que lucha contra la corrupción. Ahora se ha transformado en un símbolo. Y símbolos son a menudo más poderosos que los presidentes."

Reconciliación de los colombianos

RZECZPOSPOLITA, Varsovia: "Todo el mundo se alegra de la liberación de la rehén quizás más conocida. El presidente Bush mandó saludos, el gobierno colombiano le agradeció al Sr. Sarkozy por haber llamado a las FARC a terminar con su lucha medieval y el Vaticano ve en la liberación de Betancourt una positiva señal no sólo para todos los rehenes de este mundo, sino también para una reconciliación de los colombianos que desde hace 40 años luchan entre sí en una guerra civil."