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"Un jardín del Edén congelado”

Emilia Rojas/Agencias26 de febrero de 2008

Una Bóveda Global de Semillas fue inaugurada en el archipiélago noruego de Spitzbergen (Svalbard), en el Ártico, con el objeto de garantizar la supervivencia de la diversidad genética para las futuras generaciones.

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Una fortaleza polar para la riqueza genética de la Tierra.Imagen: Mari Tefre/Global Crop Diversity Trust

La ceremonia de inauguración tuvo toda la solemnidad del caso: música, discursos y figuras del máximo nivel brindaron el marco adecuado a la concreción de un proyecto que, más que expresión de una quijotada, es una necesidad concreta: preservar lo que va quedando de la diversidad genética vegetal en la Tierra. Para ejemplo, un botón (o mejor dicho, un grano): se estima que tan sólo en Asia han desaparecido ya irremediablemente 70.000 tipos de arroz. Lo más grave del asunto es que la diversidad resulta indispensable, ya que sólo ella garantiza que las plantas puedan adaptarse a nuevas condiciones medioambientales y resistir plagas y enfermedades.

Fort Knox ártico

Norwegen Spitzbergen Schatzkammer für Samenproben
Las semillas se mantendrán a 18 grados bajo 0 en estas cámaras.Imagen: AP

Desde esta perspectiva, la Bóveda Global constituye una “póliza de seguro” para la humanidad, según el padre y director ejecutivo del proyecto, Cary Fowler. De un “Jardín del Edén congelado” habló por su parte el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, presente en la inauguración al igual que la Premio Nobel keniana Wangari Maathai y autoridades noruegas. Durao Barroso recalcó además que éste es “un símbolo de que podemos preservar la diversidad de especies para las futuras generaciones”.

Deutsches Institut beliefert Samen-Tresor auf Spitzbergen
Semillas alemanas para la Bóveda Global.Imagen: picture-alliance/ dpa

Las tres cámaras cavadas en las montañas de Spitzbergen no constituyen un nuevo banco genético ni una versión superlativa de los ya conocidos. Más bien equivalen al Fort Knox de las reservas vegetales del mundo. Unas 270.000 muestras han sido depositadas ya en este gigantesco banco central. Y en el futuro sieguirán llegando más y más. “La intención es que lleguen a ser entre 4 y 5 millones”, señaló a DW- WORLD Grethe Helene Evjen, administradora del proyecto. La funcionaria del Ministerio de Agricultura y Alimentación de Noruega agregó que “estarán representados todos los continentes” aunque todavía falta que lleguen las semillas de Australia. Lo que no habrá serán semillas genéticamente manipuladas.

Activa colaboración internacional

Norwegen Spitzbergen Schatzkammer für Samenproben
Guardias armados protegen el tesoro genético.Imagen: AP

“Es una gran responsabilidad para mi país”, afirmó Grethe Helene Evjen, destacando que las semillas allí resguardadas no son de propiedad de Noruega. El gobierno de ese país tomó la decisión de construir los depósitos, e invirtió para tal fin 6,3 millones de euros, pero ha contado con gran ayuda internacional, también en lo que respecta a recolectar las muestras. En este contexto, Evjen destaca, por ejemplo, la activa colaboración del Centro Internacional de Agricultura Tropical de Colombia.

La función del banco mundial genético será restituir el material necesario si alguna variedad vegetal ha sido destruida, ya sea por plagas, catástrofes naturales u otro tipo de desastre. Para eso se han tomado todas las providencias técnicas del caso. Pero la principal garantía es el entorno mismo. “Una de las grandes ventajas de Spitzbergen es que se encuentra muy lejos de todos los peligros que acechan en otras partes del mundo”, comentó Fowler a la prensa. A menos de mil kilómetros de distancia del Polo Norte, el territorio es zona desmilitarizada y apenas unas 2.000 personas habitan en la isla principal de este archipiélago, siendo superadas en cantidad por los osos polares, cuyo número se estima en unos 3000.