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Costa Rica, laboratorio de conservación de la biodiversidad

Judit Alonso
14 de octubre de 2019

A pesar de su pequeño tamaño, Costa Rica concentra un 5% de la biodiversidad mundial. La conservación de esta riqueza se lleva a cabo con figuras de protección que también deben afrontar los efectos del cambio climático.

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Ökotourismus in Costa Rica  Jaguar
“Cualquier impacto que haga el ser humano en un ecosistema, lo primero que vamos a ver son los animales grandes desaparecer. Cuando, al contrario, vemos que esos animales regresan es que el ecosistema está recobrando su salud”, dice Eduardo Carrillo, del programa Jaguar.Imagen: Universidad Nacional de Costa Rica

“Siempre hemos pensado que la tecnología del futuro nos va a ayudar a resolver nuestros problemas climáticos, pero ésta ya se diseñó y se creó. Se llama árbol, bosques y ecosistemas”, dijo el ministro de Medio Ambiente de Costa Rica, Carlos Manuel Rodríguez, en el marco de la pre COP25 que se celebró esta semana en el país centroamericano.

En el encuentro se lanzó la llamada Coalición de Alta Ambición por la Naturaleza y los Pueblos, que busca asegurar la conservación del 30 por ciento del planeta para 2030, así como aumentar el secuestro de carbono y salvar las especies amenazadas. Para ello, Costa Rica, hábitat de más de medio millón de especies, mostró su experiencia en soluciones basadas en la naturaleza, a pesar de que “el cambio climático ya ha impactado la biodiversidad del país”, lamentó Grettel Vega, directora de Áreas Silvestres Protegidas de Costa Rica, apuntando a los anfibios como el grupo más amenazado.

No obstante, explicó a DW que desde hace más de 40 años Costa Rica está trabajando para conservar su biodiversidad. Así, tiene el “26 por ciento de su territorio terrestre y un 2,7 por ciento de su territorio marino bajo alguna categoría de protección dentro de su Sistema de Áreas Silvestres Protegidas (SAP)”.

Igualmente, existen 51 corredores biológicos, “cuyo fin es proporcionar conectividad entre paisajes, ecosistemas y hábitats para asegurar el mantenimiento de la biodiversidad”. Según Vega, estos “se han convertido en una estrategia nacional para atender la adaptación de la biodiversidad ante el cambio climático”.

Infografik Schutzgebiete in Costa Rica ES
Actualmente "el país cuenta con un total de 143 Áreas Silvestres Protegidas, de las cuales 132 son de administración estatal o mixta y 11 son de administración privada”, detalló Grettel Vega. Entre éstas se encuentran reservas forestales, zonas protectoras, parques nacionales, reservas biológicas, refugios nacionales de vida silvestres, humedales nacionales, monumentos naturales, áreas marinas de manejo y reservas marinas.

Innovación en la financiación

El país cuenta con algunas medidas singulares en materia de conservación, como el Programa de Pago de Servicios Ambientales (PSA), “creado para contrarrestar la deforestación que venía sufriendo el país en el periodo 1969-1986”, recordó a DW Carmen Roldán, directora de Desarrollo y Comercialización de Servicios Ambientales del Fondo Nacional de Financiamiento Forestal (FONAFIFO).

Asimismo, a partir de 1996 se determinó que el 3,3 por ciento del impuesto de combustibles fósiles debe destinarse específicamente al pago de la mitigación de gases con efecto invernadero y la protección de la biodiversidad. Por otro lado, “en 2016, la Dirección inició el Experimento Bosque Vivo OSA, una alianza público-privada en la península de la Osa, zona que alberga el 2,5 por ciento de la biodiversidad registrada en el planeta”, dijo.

La iniciativa se basa en obtener información sobre la presencia de especies que están amenazadas o en peligro de extinción en una quincena de fincas. “Estamos utilizando esos datos para pagar un plus a esas fincas. De 2016 a 2018, hemos registrado 79 especies y hemos logrado identificar cinco en peligro de extinción y ocho amenazadas”, detalló.

Alianza ciencia y empresa

Asimismo, desde el año pasado, el fondo trabaja con una red de cámaras-trampa que monitorea al jaguar en la zona. “Se conservan poblaciones estables de entre 30 y 50 individuos, los cuales se mueven desde el Parque Nacional Corcovado a otras áreas protegidas en la península”, explicó Roldán.

En esta red también participan instituciones académicas. “Investigamos el jaguar y sus presas porque son indicadores de la salud del ecosistema”, dijo a DW Eduardo Carrillo, del programa Jaguar de la Universidad Nacional de Costa Rica.  El investigador, que lleva más de tres décadas estudiando a este felino, apuntó que actualmente existe una población de menos de 500 jaguares en todo el país, de los cuales entre 100 y 150 se concentran en Guanacaste. No obstante, “estamos en el límite más bajo”, lamentó.

Carrillo criticó la falta de “conocimiento de lo que tenemos”, un conocimiento que es esencial para una conservación efectiva. También remarcó lo difícil que es “generar conocimiento, hacer ciencia” en Costa Rica. Por ello, consideró que la colaboración con la empresa privada es clave. “Por ejemplo, hemos llegado a un convenio con Sensoria, en Guanacaste, generando muchísimos datos en esa área. La investigación y generación de información tiene sentido si es utilizada de diferentes formas”, agregó.

Ökotourismus in Costa Rica  Esteban Brenes
"Las dantas solo aprovechan el 45 por ciento de lo que comen, entonces las heces son materia orgánica viva, tiran un compost", dice Brenes mostrando un ejemplo de ello. Imagen: DW/J. Alonso

Algo con lo que concuerda Donald Varela, guía naturista que colabora con la organización medioambiental Costa Rica Wildlife Foundation con cámaras para ver el movimiento de la fauna en la reserva privada Tapir Valley. “Me interesa que esa información salga de forma que la ciudadanía la pueda conocer”, dijo a DW. ”Se está generando muchísima información científica: vemos movimiento de especies, poblaciones en disminución, especies que están subiendo y otras que ya no están en zonas donde antes estaban”, detalló.

La investigación en esta finca privada, situada el corredor biológico Tenorio-Miravalles, está centrada en la danta o tapir. “Sigue estando en la lista de especies amenazadas en Costa Rica y está como una especie en peligro de extinción con menos de 5.000 individuos adultos en el mundo”, dijo a DW Esteban Brenes, director de Costa Rica Wildlife Foundation, que está intentando situar esta especie al nivel del jaguar debido “al  importantísimo rol que tiene en la regeneración de bosques”. Para ello, cuenta con la ayuda de una alianza para proteger la danta centroamericana, con la que “hemos conseguido recaudar y redireccionar fondos para hacer acción de conservación directa”, se congratuló.

Judit Alonso desde Costa Rica (dzc)

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