1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

EI mantiene secuestrados a dos japoneses

24 de enero de 2015

El ultimátum establecido por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) para obtener una paga por la liberación de dos japoneses secuestrados expiró este viernes (23.1.2015) sin que se conozca el paradero de los retenidos.

https://p.dw.com/p/1EPop
Junko Ishido, madre del periodista secuestrado, Kenji Goto.
Junko Ishido, madre del periodista secuestrado, Kenji Goto.Imagen: Reuters/T. Hanai

El ultimátum establecido por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) para obtener una paga por la liberación de dos japoneses secuestrados expiró este viernes (23.1.2015) sin que se conozca el paradero de los retenidos. Aunque algunas fuentes señalan que los yihadistas establecieron contacto con el Gobierno nipón, el secretario de Gabinete, Yoshihide Suga, dio a entender que no había avances en las negociaciones. “La situación sigue siendo extremadamente seria. Continuamos haciendo lo que tenemos que hacer para que los secuestrados sean liberados tan pronto como sea posible, dijo Suga sin ofrecer mayores detalles.

Esta semana el EI publicó un video en Internet en el que se veía a los rehenes japoneses, el periodista Kenji Goto y el contratista freelance Haruna Yukawa. En las imágenes, un combatiente del grupo advertía que los mataría a los dos si Tokio no pagaba el rescate de 200 millones de dólares en 72 horas. Ese lapsó se venció este 23 de enero. Pocas horas antes de que expirara el ultimátum, la madre de Goto rogó a los captores por la liberación de su hijo. “Kenji no es enemigo del Estado Islámico”, aseguró Junko Ishido, enfatizando que el reportero acababa de convertirse en padre. Ishido instó al Gobierno de su país a salvar la vida de su hijo.

Este sábado (24.1.2015), Japón juró “no cesar jamás” en sus esfuerzos por rescatar a los dos ciudadanos nipones en manos de EI. “Los traeremos de regreso a casa”, aseguró Yasuhide Nakayama, viceministro de Exteriores de Japón, quien lidera las negociaciones desde la capital de Jordania, Amán. No es mucho lo que se sabe del destino de los secuestrados, que aparecen en el video arrodillados, vistiendo trajes de color naranja parecidos a los que llevan los presos del campo de detención de Guantánamo. El autoproclamado Estado Islámico hizo vestir esos trajes anaranjados a todos los rehenes occidentales que ejecutó el año pasado.

ERC ( dpa / AFP )