Estudio noruego galardonado con el Premio Europeo de Arquitectura
30 de abril de 2009
"Es más que un simple edificio, es un espacio urbano, un regalo para la ciudad, que se puede considerar un catalizador de todas sus energías y un emblema de la regeneración de su tejido humano". Así lo expresó Francis Rambert, presidente del jurado, al declarar al ganador del galardón dotado de 60.000 euros. El nuevo edificio de la Ópera y el Ballet Nacional de Noruega, en Oslo, se erigió en el ganador del Premio de Arquitectura Contemporánea de la UE-Mies van der Rohe.
El jurado estuvo también integrado por tres prestigiosos arquitectos españoles, Luis M. Mansilla, Carme Pinós y Lluis Hortert, director de la Fundación Mies van der Rohe en Barcelona.
La ciudad y su bahía
El edificio de la ópera y el ballet que se levanta desde un fiordo, es el mayor centro cultural levantado en Noruega en los últimos 700 años y la primera obra arquitectónica en la zona de la bahía de Oslo que se inscribe en el esfuerzo por reestablecer el contacto de la ciudad con su frente marítimo. Lo componen 36.000 piezas encajadas. Su tejado es de mármol y el interior, de 1.000 metros cuadrados, está revestido con carpintería fina sobre la que se han aplicado las técnicas que tradicionales de los constructores de barcos del país nórdico.
Su artífice es el estudio de arquitectura Snohetta. Fundado en la capital noruega en 1989 y con oficinas en Nueva York, está integrado por Kjetil Trædal Thorsen (1958, Haugesund), Tarald Lundevall (1948, Oslo) y el alemán Craig Dykers (1961, Fráncfort del Meno).
El jurado otorgó la mención especial al Arquitecto Emergente al estudio croata STUDIO UP/ Lea Pelivan y Toma Plejic, por el proyecto de un gimnasio en Koprivinca.
El Premio de Arquitectura Contemporánea Mies van der Rohe es uno de los más importantes a nivel mundial. Con el apoyo de la Unión Europea (UE), se concede de forma bienal a proyectos completados en los dos años anteriores. La entrega del galardón tendrá lugar el próximo 28 de mayo en el Pabellón Mies van der Rohe de Barcelona.
EU/dpa
Edición: Emilia Rojas Sasse