1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Informe: energía hidráulica

2 de agosto de 2011

La energía hidráulica es una forma de energía renovable especialmente madura con cientos de años de tradición.

https://p.dw.com/p/129aS

Que el agua es capaz de generar energía es algo que el ser humano conoce desde tiempos remotos. Durante gran parte de la Historia, la energía hidráulica se empleó sobre todo para moler harina, para impulsar el bombeo de agua, serrar o mover otro tipo de herramientas. Es a finales del siglo XIX cuando se extiende el uso del agua para producir electricidad. Para ello, el agua se embalsa a la mayor altura posible para, posteriormente, dejarla caer. La energía cinética generada hace girar una turbina hidráulica o una noria, a través de las cuales la energía se transforma en electricidad a través de un generador. Se trata de un principio idéntico al que se produce con la dinamo de una bicicleta, sólo que de una dimensión mayor.

Las centrales hidroeléctricas pueden ser manejadas con absoluta precisión, algo que supone una clara ventaja respecto a otras formas de energía alternativa. Por ejemplo, a través de las denominadas centrales hidráulicas reversibles o centrales de bombeo. Cuando la demanda de electricidad es escasa, dichas instalaciones permiten almacenar la energía generada y que no se consume. Dicha electricidad sobrante almacenada permite bombear de nuevo el agua acumulada en la parte inferior de la presa hacia un nivel superior para que, en caso de ser necesario, sea nuevamente liberada y utilizada para producir electricidad.

Países montañosos ricos en agua, como Noruega, pueden prácticamente satisfacer su demanda de electricidad a través de la energía hidráulica. Países alpinos como Suiza y Austria cubren casi dos terceras partes de su consumo eléctrico gracias a la energía generada por el agua. En todo el mundo, las centrales hidroeléctricas producen alrededor de una séptima parte de la electricidad que se necesita. Incluso las gigantescas instalaciones hidroeléctricas producen electricidad sin liberar gases de efecto invernadero perjudiciales para el medio ambiente. Pero la electricidad procedente de los ríos no está exenta de polémica: para la construcción de muchos megaproyectos –como, por ejemplo, en la selva amazónica brasileña-, grandes superficies son inundadas y el hábitat de seres humanos y animales, destruido para siempre. El informe de GLOBAL IDEAS muestra grandes y pequeños proyectos en los que la energía hidráulica funciona de forma ejemplar.