La Unión Europea, cautelosa ante la crisis en Venezuela

"La postura de la Unión Europea es clara: reitera que no respalda a Maduro y apoya explícitamente a las últimas elecciones que considera democráticas, transparentes y libres, que fueron las que conformaron la Asamblea Nacional", afirma el politólogo alemán Günther Maihold sobre la postura dada a conocer este jueves en Bruselas.

El subdirector del Instituto alemán de Asuntos Internacionales y Seguridad (SWP), destaca la importancia del consenso alcanzado. "Hace unos días, cinco países miembros pidieron a la alta representante de la UE para la Política Exterior, Federica Mogherini, establecer un grupo de diálogo con el gobierno de Venezuela, un grupo encabezado por España, Italia y Francia, por lo que se entiende el claro interés de la Unión Europea de no entrar en una situación de confrontación y dar alas a la lucha entre dos presidentes".

Un enfrentamiento entre el autoproclamado presidente interino, Juan Guaidó, y el jefe de Estado en funciones, Nicolás Maduro, podría tener un desenlace sangriento que el bloque europeo quiere evitar.

Evitar más muertos a toda costa

Barbara Lochbihler, portavoz en política Exterior y de Derechos Humanos del grupo parlamentario Los Verdes/Alianza Libre Europea en el Parlamento Europeo, comparte esta postura. "Ante la recrudecida situación en Venezuela, no se trata de tomar partido, sino de impedir una mayor violencia, y más muertos".

Lochbihler, política del partido de los Verdes, que fuera secretaria general de la sección alemana de Amnistía Internacional, llama a todas las partes a que observen los principios del Estado de Derecho y de respeto a los Derechos Humanos. Asimismo, llamó al diálogo y propuso que si los involucrados así lo desean, puede haber una intermediación internacional.

En una declaración en nombre de los 28 Estados miembros, Mogherini extendió el total apoyo a la Asamblea Nacional por ser la institución elegida democráticamente por los venezolanos e instó a restaurar y respetar sus poderes.

Sin embargo evita reconocer a Juan Guaidó como presidente interino, como se proclamó él mismo ante una manifestación multitudinaria con la que desafió a Maduro.

"La Unión Europea asume la postura legal de no reconocer individuos, sino Estados," destaca Maihold. El politólogo explica que en todo caso Guaidó tendría un nombramiento de carácter simbólico y sin ninguna posibilidad de ejercer el cargo.

Estados Unidos en situación difícil

Estados Unidos, que sí reconoció a Guaidó como presidente interino, al igual que Canadá y otros países latinoamericanos, excepto México, ignoró la reacción de Maduro, que rompió relaciones diplomáticas con Washington y le dio un plazo de 72 horas para retirar a su personal diplomático.

El Secretario de Estado Mike Pompeo desconoció a Maduro como presidente legítimo y refrendó su apoyo al presidente de la Asamblea Nacional. Una situación que tendrá un desenlace incierto.

"Esto podría significar que ya no se respetan las garantías de inmunidad de los diplomáticos estadounidenses. Oficialmente ya no estarían reconocidos por un gobierno ante el cual presentaron sus cartas credenciales como diplomáticos".

El politólogo explica que, una vez despojados de su inmunidad diplomática, podrían ser deportados, siendo declarados personas non gratas, y que Caracas incluso podría asumir el control de los bienes inmuebles de Estados Unidos en territorio venezolano.

El desenlace, en manos de los militares

Algunos generales investigados por la DEA por su implicación en narcotráfico se mantendrán fieles a Nicolás Maduro buscando protección. Maihold señala que la decisión estará en manos de los militares. "No en los altos mandos, que están comprometidos con el régimen, ya sea como miembros del gabinete o en funciones administrativas, y en la misma petrolera estatal PDVSA".

Pero habrá que ver la reacción de los mandos medios. "El papel y la posible división interna de los militares es el factor clave para el desenlace de esta crítica situación.  El soldado raso está sufriendo de igual manera, como el resto de la población, la escasez de alimentos y medicamentos".

"Esto podría abrir una brecha, y a esto precisamente está apuntando la oposición, que está presentando un proyecto de ley de amnistía, abriendo ahí una ventana para aquellos militares que se quieran desligar del régimen". Sin embargo el politólogo reconoce que no hay todavía un panorama claro sobre lo que está pasando en el seno de las fuerzas armadas.  

(cp)