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El transporte más caro de la historia

27 de noviembre de 2011

El último convoy de residuos nucleares de centrales alemanas reprocesados en Francia avanza en medio de fuertes enfrentamientos entre policías y manifestantes que han logrado retrasarlo como a ningún tren anterior.

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Agricultores se oponen a que la basura nuclear quede cerca de sus tierras.Imagen: dapd

Después de una interrupción de 19 horas en la estación ferroviaria de Maschen, el tren continuó su camino con su controvertida carga por la tarde del domingo. Desde la noche del sábado, los once vagones del convoy estuvieron varados en la mayor estación de maniobras de Europa, situada en el sur de Hamburgo. Pasando la localidad de Lueneburg el tren comenzó el último trayecto, de unos 60 kilómetros, antes de llegar a Dannenberg en donde los contenedores serán colocados sobre camiones. La basura nuclear llegará sobre ruedas a su destino final, el depósito provisional de Gorleben.

En el último trayecto ferroviario activistas y policías movilizaron todas sus fuerzas. En puntos estratégicos el colectivo anti-nuclear ocupó las vías del tren, encadenándose a ellas o desenterrándolas para impedir el paso el convoy. Según afirman organizaciones anti-nucleares, la policía reaccionó batiendo a los activistas con porras y gas pimienta. Aún así señalaban en sus comunicados: "El ambiente es fantástico, seguimos intentando llegar a las vías del tren y donde es posible aprovechamos cualquier hueco policial".

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El movimiento anti-nuclear, más vigoroso que nunca.Imagen: dapd

Miles sentados en las vías

Según estimaciones de la policía hasta unos 3.500 detractores nucleares ocuparon las vías sentándose sobre ellas y hubo que cargarlos uno a uno, una labor que ocupó a la policía durante unas 16 horas, hasta avanzada la noche del sábado.

Testigos oculares señalaron que el desalojo transcurrió pacíficamente. Un portavoz de la organización "Wiedersetzen" (oponerse), reconoció que hacía tiempo que no veía un desalojo tan pacífico. Otro punto del recorrido estuvo bloqueado por tractores de agricultores contrarios al almacenamiento de desechos atómicos en su región, el despeje ocupó a miles de policías durante toda la noche.

Pero no en todos los puntos los enfrentamientos entre policía y manifestantes transcurrieron de manera pacífica. El sábado varias personas que trataron de ocupar las vías del tren cercanas a Gorleben, donde desde ayer se esperaba la llegada del cargamento, fueron dispersadas por la policia con bastones y aerosol. En otro punto del recorrido elementos de la policía montada amedrentaron con sus caballos a los manifestantes, videos mostraban a algunos de ellos bajo las patas de los animales. Organizaciones confirmaron que no hubo heridos.

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Detractores nucleares se movilizaron este fin de semana desde todo el país.Imagen: picture-alliance/dpa

Críticas al operativo policial

La policía dijo el domingo que han sido detenidos unos 1.200 activistas. La líder del partido de Los Verdes, Claudia Roth criticó la movilización policial calificándola de "exagerada". "No es aceptable que el Estado ataque a la gente con bastones y cañones de agua. Las protestas contra el transporte de basura radioactiva son legítimas y expresión de la desobediencia civil. Los detractores nucleares están haciendo uso de su derecho a manifestarse ", dijo la política durante el congreso anual de su partido.

La fuerte oposición al transporte nuclear lo ha demorado a tal grado que ha roto un récord de lentitud, provocando enormes costos al estado federado de Baja Sajonia. Desde que se pusiera en marcha el pasado miércoles en la planta de reprocesamiento de La Hague, en el norte de Francia, su paso ha sido constantemente interrumpido y ya superó el récord de 92 horas que demoró el transporte de basura nuclear el año pasado, cuando los retrasos supusieron un gasto de 36,5 millones de euros.

Autora: Eva Usi

Editor: José Ospina Valencia