Los nerds se entrenan en seducción 2.0

¿Qué hace un especialista en nuevas tecnologías, de los cuales la mayoría son hombres, luego de configurar un servidor, partir un disco duro o conectar computadoras a una red durante todo el día, prestándonos un servicio imprescindible? Muchos de ellos pasan su tiempo libre en casa, tratando de avanzar al nivel 65 en World of Warcraft, en lugar de poner a prueba su capacidad de seducción.

Mientras para ellos la actividad de desentrañar el interior de una computadora se vuelve parte de su naturaleza, el hecho de mantener una conversación interesante con una dama atractiva es un objetivo difícil de alcanzar. Y, si lo intentan, muchas veces el resultado es una caída total del sistema, ya que muchas señoritas en la discoteca o en el bar no muestran demasiado interés en hablar sobre el ancho de banda y el RAM mientras beben un cosmopolitan.

Por todo ello, la Universidad de Potsdam, al sur de Berlín, puso en marcha un plan de ayuda para los ingenieros informáticos. Unos 440 alumnos de posgrado han comenzado a tomar lecciones en seducción y flirteo como parte de su plan de estudios. Los contenidos van desde aprender a escribir mensajes jugosos en móviles y por correo electrónico, manejarse exitosamente en una fiesta y, en el peor de los casos, cómo enfrentar un posible rechazo en lugar de esconderse o desaparecer para siempre dentro de los personajes de un juego de roles online.

Dichos temas forman parte de un curso de habilidades sociales cuyo objetivo es facilitar a los estudiantes la entrada al mundo laboral y a la interacción con seres de carne y hueso. Además de aprender a flirtear y a seducir, también se les enseña a interpretar y a poner en práctica señales corporales positivas como, por ejemplo, dejar de caminar encorvado arrastrando los pies, hablar en público, manejar el estrés y mostrarse en sociedad.

“Queremos preparar a nuestros estudiantes para que posean las habilidades sociales necesarias para tener éxito tanto en su carrera profesional como en su vida laboral y privada”, dijo a Reuters Hans-Joachim Allgaier, vocero de la mencionada casa de estudios alemana.