El palacio de Sanssouci, la residencia estival de Federico el Grande, es el lugar preferido por los más de tres millones de turistas que visitan Potsdam anualmente. Federico II subió al trono en 1740 y legó a Potsdam, entre otros, dos palacios con jardines espectaculares. Durante los años recientes, Potsdam se ha convertido en una de las ciudades más atractivas de Alemania.
Y en una de las más caras. El casco antiguo se ha saneado por completo y el palacio de la ciudad se ultimó en 2013. Desde entonces es sede del parlamento regional. La iglesia de San Nicolás luce su restauración desde 2010. Casi toda la ciudad lleva la impronta de los reyes de Prusia, también el barrio holandés con sus edificios de ladrillo rojo. Hoy alberga boutiques, cafés y galerías de arte.