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Stasi usó a neonazis para espiar a derechistas de la RFA

6 de agosto de 2015
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La Stasi, la policía política de la extinta República Democrática Alemana (RDA), usó a neonazis como confidentes para espiar las actividades de los grupos ultraderechistas en la Alemania occidental, informó este jueves (06.08.2015) el diario Berliner Zeitung. De acuerdo con este rotativo, que se remite a documentos conservados en los archivos de la Stasi, el Ministerio de Seguridad del régimen germano-oriental tenía al menos 42 de los llamados “colaboradores no oficiales” -es decir, confidentes habituales- entre esos ambientes.

A ellos se sumarían otros 30 presuntos infiltrados o informantes, según sus registros, que o bien colaboraban de forma regular con la Stasi o bien estaban en su objetivo como elementos susceptibles de ser reclutados para estos objetivos. El rotativo añade que las actas de la Stasi relativas a esos confidentes podrían contribuir a las investigaciones recientemente reabiertas por la Fiscalía federal relativas al atentado cometido en 1980 contra la Oktoberfest de Múnich, en que murieron 13 personas y otras 211 resultaron heridas.

La misión principal de estos neonazis reclutados por la Stasi era suministrar información sobre las actividades de la ultraderecha occidental, a fin de evitar atentados contra la frontera que dividió la RDA y la República Federal de Alemania (RFA). Sin embargo, se considera que estos infiltrados también podrían haber aportado en su momento información sobre ese atentado en la multitudinaria fiesta de la cerveza de Múnich.

El presunto autor material del atentado, Gundolf Köhler, de 21 años y miembro del grupúsculo ultraderechista denominado “Wehrsportgruppe Hoffmann”, resultó muerto asimismo en la explosión. Durante décadas se dio por hecho que fue su autor en solitario, pese a las reiteradas peticiones de algunos supervivientes y familiares de las víctimas para que se siguiera investigando una presunta trama ultraderechista..

Hace unos meses, la investigación fue reabierta por la Fiscalía federal ante la aparición de nuevos indicios sobre posibles cómplices. (EFE)