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Viena en jaque

23 de septiembre de 2011

Un misterioso francotirador mantiene a Viena presa del miedo. 14 personas han sido ya víctimas en la capital austriaca de los disparos del desconocido. La policía lo busca. Sobre sus motivos nada se sabe.

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APA5310668-2 - 21092011 - WIEN - ÖSTERREICH: ZU APA 356 CI - THEMENBILD - Jener unbekannte Heckenschütze, der seit mittlerweile fast vier Wochen in Wien mit einem Luftdruckgewehr scheinbar wahllos auf Passanten schießt, dürfte nach Polizeiangaben bereits 15 Personen verletzt sowie zwei Sachbeschädigungen verursacht haben. Aufgrund mehrerer Zeugenaussagen bestehe nun die Möglichkeit, dass ein "kleiner, heller Pkw" mit den Taten in Zusammenhang stehen könnte. Im Bild: Ein Mann ziehlt am Samstag, 27. Juni 2009, mit einem Gewehr in Richtung Himmel (gestellte Szene). APA-FOTO: HANS KLAUS TECHT - 20090627_PD5325
Los motivos del francotirador austriaco se desconocen.Imagen: picture alliance/APA/picturedesk.com
Iba a ser una noche agradable, familiar: una cena en el barrio vienés de Favoriten con su madre y su hija de cuatro años. Pero a Stefan Lanzel le sucedió lo impensable. Y la velada acabó convirtiéndose en una más propia del cine que de la vida real.
 
“Salíamos del aparcamiento cuando me paré un momento antes de incorporarme al tráfico”, recuerda Lanzel, “de pronto, algo me golpeó y la cabeza se me fue para atrás. Mi madre empezó a gritar ‘¡un disparo, ha sido un disparo! Nos trasladamos de inmediato al hospital”. De la sien le extrajeron los médicos un proyectil.
 
Mientras transcurría la operación, a pocos metros del lugar en el que Lanzel había sido herido de bala caía la siguiente víctima. Roman Pfeiffer caminaba tranquilamente calle abajo. “De repente, sentí un dolor en la mano, y pensé ‘alguien me está disparando con algo’. En ese mismo momento escuché un ruido, debía de estar muy cerca de mí”, cuenta.
 
17 ataques, 14 víctimas
 
Der Kohlmarkt in Wien am 20.07.2010. Foto: Oliver Berg dpa
Viena lleva un mes sumida en un extraño ambiente.Imagen: picture-alliance/Oliver Berg
La locura que mantiene en jaque a Viena empezó hace un mes. Desde entonces, no pasa un día sin que la capital austriaca tenga noticias del misterioso francotirador. 17 veces ha atacado ya, 14 de ellas con éxito. Al parecer, sus objetivos los elige al azar. Una niña de 16 años, una señora mayor, un conductor o un viandante, en prácticamente toda el área metropolitana.
 
Salvo un policía de civil que fue alcanzado en el cuello, nadie ha sufrido hasta ahora heridas de extrema gravedad. El desconocido utiliza para sus actos un fusil de aire comprimido, cuya peligrosidad depende mucho de la distancia desde la que se dispare, explica Werner Sodia, dueño de una tienda de armas en el centro vienés: “cuanto más de cerca, mayores son los daños, que pueden ser moratones, hematomas y también incursiones en regiones en las que hay poca piel, si la distancia es realmente muy corta”.
 
Un juego de poder
 
El caso recuerda a los austriacos lo sucedido en Washington hace nueve años, cuando un hombre convirtió vilmente en dianas a los paseantes y acabó matando a 10 personas. En aquella ocasión, el susodicho tenía un cómplice. Si éste actúa solo o en compañía se desconoce tanto como sus motivos.
 
“Lo que tiene lugar aquí es un juego de poder”, analiza el psiquiatra Sigrun Roßmanith, “pero el poder también es deleite. El disparar por detrás, sin ser visto, elegir a la víctima –decidir a quién le toca, a quién no- suele estar relacionado con el hecho de sentirse todopoderoso”.
 
20.000 euros ha fijado la policía austriaca como recompensa para quienes aporten pistas de utilidad. Y ya se han podido recopilar algunos datos. “A partir de declaraciones de testigos sospechamos que el autor conduce un turismo de pequeño tamaño y color claro”, dice el portavoz de la Oficina Federal Criminal austriaca, Mario Hejl. No es que se trate de un gran avance en la investigación, pero al menos es un punto de partida.
 
Autor: Tim Gerrit Köhler/ Luna Bolívar
Editor: Enrique López Magallón