1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

Casa natal del Papa será museo

ERS22 de diciembre de 2005

Los miles de turistas y peregrinos que llegan a Marktl ya no tendrán que conformarse con ver por fuera la casa donde nació Benedicto XVI, que su dueña piensa vender a una fundación de la Iglesia Católica.

https://p.dw.com/p/7h55
Aquí ya nadie puede vivir tranquilo.Imagen: dpa - Bildfunk

Más de 100 mil personas han visitado en el último tiempo Marktl am Inn, donde antes no llegaba más de una veintena de forasteros al año. Ese pueblito bávaro, de 2.700 habitantes, se ha vuelto un imán turístico desde que su hijo más ilustre, Jospeh Ratzinger, se convirtiera en el Papa Benedicto XVI. Transformada en el más codiciado objetivo de fotógrafos y curiosos, la casa donde en 1927 nació el Pontífice dejó de ser, desde luego, un hogar apacible para su dueña, quien la puso en venta tiempo atrás.

Suma secreta

Desde entonces circularon especulaciones de todo tipo. Cuando se supo que hasta había algún magnate árabe interesado, se llegó a temer que el histórico inmueble pudiera convertirse en una especie de centro turístico al estilo de Las Vegas. Para alivio de la Iglesia local, eso no ocurrirá. Tras meses de incertidumbre, se anunció que una fundación eclesiástica comprará la casa, que data del año 1745. Se espera que la operación se concrete a mediados del año entrante pero, desde ya, quedó claro que el edificio se dedicará al objetivo de dar a conocer más acerca de la vida y obra del Papa bávaro.

Sobre la suma acordada para la transacción, en cambio, se guarda un hermético silencio. Informaciones de prensa aventuran cifras que alcanzan hasta los 3,5 millones de euros, aunque en círculos de agencias inmobiliarias se estima que ese precio es excesivo. Un avalúo realista bordearía, según dicen, el millón de euros.

Dividendos espirituales

Jubel in Deutschland über Papstwahl
La elección del Papa Benedicto les cambió la vida a los habitantes de Marktl.Imagen: AP

Sea cual fuere el monto, seguramente la inversión valdrá la pena, porque el proyectado museo del Papa Ratzinger promete atraer también en el futuro a miles de visitantes a Marktl. Tal perspectiva no sólo alegra a los que esperan obtener beneficios comerciales, sino igualmente a los que se preocupan más de los dividendos espirituales, como el párroco del pueblo, Josef Kaiser. En una entrevista que publica el semanario Die Zeit, el sacerdote asegura que se ha registrado un aumento de la espiritualidad y que "jamás se había rezado tanto en Marktl" como desde la elección de Benedicto XVI.