1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

¡El cortometraje vive!

mb16 de septiembre de 2003

En la brevedad está el sabor, dice un refrán alemán. Breves son los cortometrajes que se presentan del 16 al 21 de septiembre en el Festival de Cortometrajes de Colonia. Algunas opiniones sobre su función... y su sabor.

https://p.dw.com/p/452b
Logo del Festival de Cortometrajes de Colonia.
En Colonia tiene lugar el 6. Festival de Cortometrajes "Short Cuts Cologne", en el cual competirán producciones de 63 países. 2300 filmes cortos llegaron al concurso –entre los cuales hay animaciones, documentales y ficción. 180 llegarán hasta las ojos del público, quien también podrá elegir a su preferido. Preguntado un experto por la duración que debe tener, lo definió como que el cortometraje "entre largo y minúsculo tiende a pequeño". Los de este festival no deben pasar los 30 minutos.

La televisora Arte –que organiza y patrocina el festival- en una entrevista con la directora de una agencia de cortometrajes, Astrid Kühl, indagó por la función de este formato. ¿Se trata de un formato independiente o es, simplemente, una preparación para un filme más largo? Para muchos de los que quieren rodar una película narrativa, explica la experta, el cortometraje tiene la función de una tarjeta de presentación.

Ámbito de experimentación

Sin embargo, en Alemania existe una gran corriente de productores, cuyo lema es "un filme es un filme", su duración da igual. Se trata sobre todo de gente que no presenta tramas lineares, para los que experimentan. Esta tendencia, sin embargo, se dirige a un público muy selecto, pues el gran público, acostumbrado ya a las largas historias llenas de recuerdos de niñez y juventud, no soporta una escena más apacible. Empieza a zapatear.

¿Quiere decir que el cortometraje ha perdido su función, y que su sitio es otro, el internet, por ejemplo? Astrid Kühl opina que este género debe estar en donde se vea, un bar, las estaciones de ferrocarril, el internet. Como cortometraje previo debe tener función de inspiración y no durar más de 6 o 7 minutos, de lo contrario.... el público protesta.

Los tiempos en que productores como Werner Herzog, George Lucas, Roman Polanski o István Szabó presentaban sus ideas en cortometrajes, que además vendían, se acabaron con la década de los 60. En la decáda de los 70, el género se volvió hábitat del conflicto norte-sur y del diálogo este-oeste, según la opinión de Ingo Petzke de la Escuela Politécnica de Würburgo. Y la basis económica desapareció.

La poesía de lo breve

El cortometraje hoy es la copla de los poemas, dice otro analista, y agrega que si el largometraje corre por una autopista, el corto es el auto de Schumacher, que es más rápido y llega antes. El corto es el medio central del experimento, la fantasía y de la transmisión de mensaje –no olvidemos que los comerciales también pueden ser vistos como "cortos". El cortometraje no termina en la pantalla, sino en el espectador. Quizá por eso, los criterios con los que ganaron el Festival de Cortometraje de Colonia del año anterior fueron "la atmósfera poética" y "los espectadores nos volvemos directores de nuestra propia película".