1. Ir al contenido
  2. Ir al menú principal
  3. Ir a más sitios de DW

El emir de Catar entrega el poder a su hijo

25 de junio de 2013

El emir de Catar, el jeque Hamad bin Jalifa Al Thani, entregó el gobierno del país a su hijo y heredero, el jeque Tamim.

https://p.dw.com/p/18vZH
Imagen: Reuters

"Ha llegado el momento de abrir una nueva página en la historia del país para que tome el mando una nueva generación", dijo Hamad en un breve discurso televisado. "Estoy convencido de que está listo para la responsabilidad (....) de cumplir esta misión. Estoy seguro de que ustedes apoyarán al jeque Tamim como lo han hecho conmigo", señaló el emir, de 61 años.

El cambio en la cúpula se produce en momentos en que el emirato está buscando ampliar su peso en la región. Miles de ciudadanos y dignatarios de Catar iniciaron su peregrinaje al palacio para jurar lealtad a Tamim, de 33 años, quien fue nombrado heredero en 2003. El proceso durará dos días, luego de lo cual se espera que nombre a su nuevo gobierno.

Hamad bin Jalifa Al Thani y su hijo, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani.
Hamad bin Jalifa Al Thani y su hijo, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani.Imagen: Karim Jaafar/AFP/Getty Images

Traspaso a hijo más joven no es habitual

El traspaso del poder a un hijo más joven no es habitual en las monarquías árabes. En opinión de los observadores, la decisión de los Al Thani pone bajo presión a las otras dinastías de los países del Golfo, gobernados por la generación de los abuelos.

Hamad depuso a su padre en un golpe no violento en 1995, con el apoyo de la familia real, mientras que el antiguo emir abandonó el país. Fue coronado oficialmente en 2000. Durante su reinado, Hamad puso al pequeño país en el mapa político y económico mundial. También bajo su mandato creó el canal de televisión Al Yazira, inaugurado en 1996.

Doha apoyó además la "primavera árabe", la cadena de protestas en la región, así como el aumento del poder de los islamistas en el norte de África. Además, bajo su reinado Catar ganó la competencia para organizar el Mundial de Fútbol de 2020. Sin embargo, los cambios políticos no han ido al mismo ritmo que los económicos, y de hecho Qatar sigue siendo una monarquía absoluta.

El Estado del golfo, que depende principalmente de los ingresos por el petróleo y el gas, creció un 6,3 por ciento en 2012. Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), Catar tiene el mayor ingreso per cápita del mundo.

CP (dpa, rtr, afp)