Exitosas a pesar de la crisis

La empresa constructora de maquinaria Herrenknecht de la ciudad de Schwanau, trabaja a su capacidad total. Los trabajadores fabrican en este momento un taladro de 120 toneladas. Este taladro será utilizado para atravesar las masivas montañas suizas del Gotardo y construir el túnel ferroviario más largo y caro jamás visto.

Esta empresa está acostumbrada a los superlativos. Desde que Martin Herrenknecht la fundó hace 25 años, sus ganancias crecen y crecen. Tan solo en el 2001 registró un incremento del 55%.

Este consorcio de construcción de taladros para túneles es líder a nivel mundial y forma parte de un selecto grupo de empresas alemanas que no se han visto afectadas por la actual crisis económica.

A prueba de fuego

Sachsenring ha suspendido pagos, Kirch Media, Philip Holzmann y otras empresas se han declarado en quiebra. Se acumulan los pronósticos sobre un nuevo récord de más de 40.000 quiebras en el 2002. Lo único que parece tener auge en este momento es el pesimismo, indica irónicamente Wendelin Wiedeking, jefe de la empresa automotriz Porsche. Y tiene razón. Las malas noticias hacen olvidar por completo que también hay "estrellitas" en este país. Así por ejemplo, los gigantes farmacéuticos Schering y Atlanta lograron incrementos de sus ganancias en el 2001, de 24 y 41% respectivamente. Incluso en sectores fuertemente perjudicados por la crisis, como el sector bancario, el comercio minorista o el de las tecnologías de información, hay empresas que logran salir victoriosas en malos tiempos.

Gangas millonarias

Por ejemplo Medion, abastecedor de computadoras y productos electrónicos de Aldi, una de las mayores cadenas comerciales alemanas, logró duplicar sus ventas y ganancias durante el primer trimestre del 2002, a pesar de que durante el periodo comparable, el sector alemán de la computación registró un retroceso del 8%. Medion se concentra en la venta de gangas.

Lujo contra crisis

Y mientras que unos hacen sus fortunas con gangas, otros se concentran en la producción de calidad a muy altos precios. En el 2001 se redujo la venta de automóviles un 4 % a nivel internacional y todo indica que esta tendencia se prolongará. Pero esto no representa ningún problema para BMW. El consorcio automovilístico muniqués registró ventas récord en el 2001 y en el primer trimestre de este año logró nuevamente un incremento de ventas del 14%.

Y en el caso de Porsche, el constructor de automóviles más exitoso del mundo, los negocios corren tan bien que incluso ha tenido que implementar más turnos de trabajo. Wiedeking, jefe de esta empresa, asegura que el mundo marcha como debe ser. Después de todo se encuentra en la confortable situación de tener como clientela a personas a las que les preocupa poco la actual debilidad económica.