Irán: lista reformista logra 29 de los 30 escaños de Teherán
27 de febrero de 2016
Este resultado también dejaría dentro de la cámara, y como el segundo candidato más votado tras Aref en todo el país, a Alí Motaharí, destacado líder reformista y una de las voces más activas en el país para exigir la rehabilitación de los líderes del movimiento "verde" y mayores libertades sociales y políticas en el país.
El único "principalista" elegido sería Gholamalí Hadad Adel, consuegro del líder supremo Alí Jameneí y séptimo en las preferencias de los teheraníes. De mantenerse esa tendencia, obtenida tras el recuento de 1,2 millones de votos, el resultado permitiría a este bloque que apoya las políticas de acercamiento con Occidente, liberalización y apertura económica del presidente Hasán Rohaní dar un vuelco a la aritmética parlamentaria e incluso superar en escaños a los conservadores "principalistas".
¿Se confirma reapertura progresiva de Irán?
Hasta este momento, el recuento provisional y cálculos realizados por los medios iraníes daban a los "principalistas" un mínimo de 75 escaños, frente a 48 de los reformistas y 55 de los candidatos independientes. Con los datos de Teherán se produciría un virtual empate en la cámara que anularía cualquier intento extremista para utilizar el Parlamento como herramienta contra las políticas de Rohaní.
Durante la jornada de votación del viernes en Teherán fue evidente el apoyo mayoritario que el bloque reformista y moderado estaba recibiendo de los ciudadanos, que también apoyaron de forma masiva al expresidente Hashemí Rafsanyaní, a Rohaní y a sus candidatos para la Asamblea de Expertos en Teherán, donde obtuvieron 13 de los 16 escaños en dicho cuerpo, encargado de controlar y elegir a un nuevo líder supremo en caso de vacante.
Los cálculos oficiales de la participación en las elecciones cifraron en unos 33 millones, aproximadamente el 60% del censo electoral, el número de votos registrados durante la votación. Las mesas electorales de Teherán cerraron ayer tras casi 16 horas de votación y cinco prórrogas sobre el horario establecido debido a la gran afluencia de electores que participaron en los comicios.
La votación discurrió con normalidad y total tranquilidad a lo largo de la jornada, en donde fueron evidentes las largas colas de votantes en los colegios de Teherán. Casi 55 millones de iraníes (54.915.024) fueron convocados a estas elecciones.
La campaña electoral, de tan solo una semana, se centró en temas económicos, en los pedidos de voto útil y en los intentos conservadores de desprestigiar a los aliados de Rohaní, favoritos para reafirmar en el Parlamento la progresiva apertura del país.
JOV (efe, zeit)