La euforia verde

Stuttgarter Zeitung, de Stuttgart: “El auge creciente de Los Verdes en Alemania tiene que ver con que sus miembros han vivido desde las bases los enfoques socio-políticos progresistas de su partido: igualdad participativa y de género, apertura a la inmigración y a otros grupos sociales. Además, rechazan el culto a la personalidad y apuestan fuertemente al trabajo en equipo. El anuncio de Kretschmann, el candidato de Los Verdes que podría ser ministro presidente de Baden Wurtemberg, de que gobernaría ese Estado basándose en ‘la conciliación, la mesura y el equilibrio' refleja esas posturas.”

“Gran interés por la política y mayor intención de voto”

Frankfurter Rundschau, de Fráncfort del Meno: “Para que los resultados del domingo se conviertan en una tendencia hacen falta dos cosas. Por un lado, las coaliciones entre el Partido Socialdemócrata (SPD) y los Verdes deben demostrar nuevamente que son capaces de llevar a cabo reformas decisivas, más allá de lo concerniente a la energía atómica, y de generar confianza en los electores indecisos. En segundo lugar, nosotros, los votantes, pondremos en práctica lo aprendido. Hemos constatado que el verdadero interés por la política y que la correspondiente intención de voto podrían cambiar realmente algo en el país. Si Angela Merkel demuestra que por fin ha entrado en razón, los que votamos el domingo pasado hemos votado contra la energía atómica. Nada más, pero tampoco nada menos. Quien quiera más deberá estar dispuesto, también en el futuro, a interponerse a los políticos, aún cuando los tiempos sean calmos y las preocupaciones disminuyan un poco.”

“Angela Merkel no planea reformas”

Thüringer Allgemeine Zeitung, de Erfurt: “Angela Merkel no quiere cambiar nada. Si fuese por ella, debería renunciar el ministro federal de Economía, Rainer Brüderle, o el primer ministro del Estado de Baden Wurtemberg, Stefan Mappus. La canciller alemana no piensa reformar el gabinete ni cambiar de rumbo. Pero eso es comprensible si se tiene en cuenta que acaba de perder un ministro de Defensa, Karl-Theodor zu Guttenberg, y cambió de cartera a otro. Y, por otra parte, ¿qué rumbo debería tomar? La Unión Cristianodemócrata (CDU) no está en condiciones de ofrecer nada, ni en lo personal ni en cuanto a contenidos. No puede retornar a una política atómica conservadora, así como tampoco a una repetición del experimento neoliberal. Por consiguiente, la canciller alemana ha logrado convertirse dentro de la CDU en aquello de lo cual ella calificaba su política: sin alternativa. Ahora sentirá en carne propia lo que es personificarlo."

“Partido Socialdemócrata: incomprensible optimismo”

Frankfurter Allgemeine Zeitung, de Fráncfort del Meno: “Es un misterio de dónde surge una y otra vez el optimismo del Partido Socialdemócrata, siendo que llegó a un récord de pérdida de votos en 2010, en las elecciones en el Estado de Renania del Norte-Westfalia, y el año anterior en las elecciones parlamentarias. Lo que, por el contrario, sí se hace evidente es que los socialdemócratas no tienen nada que festejar. Ya sean los temas dominantes el ocaso de la coalición, la política social, la crisis financiera global o la política energética, parecería que el Partido Socialdemócrata no es capaz de capitalizar los grandes cambios.”

CP/dpa
Editor: Pablo Kummetz