Shakira y Pies Descalzos
22 de junio de 2015
La Fundación Pies Descalzos es una organización no gubernamental colombiana fundada por la cantautora colombiana Shakira en 1997 con el objetivo de construir un país más equitativo y solidario. La organización apuesta por la educación como medio para alcanzar este objetivo. Este año, unos 7.000 niños y jóvenes (hasta que concluyen el ciclo escolar) y unos 63.000 adultos, habitantes de las comunidades más vulnerables de Colombia, son respaldados desde las escuelas y centros comunitarios. La directora de Pies Descalzos, Patricia Sierra, llegó al Global Media Forum (GMF), organizado por la emisora internacional alemana, Deutsche Welle, que este año dedica su atención al tema "Política Exterior y Medios en la Era Digital". En conversación con DW, Patricia Sierra señaló que Shakira mueve sentimientos e ideas en el mundo y es una buena representante de América Latina en el foro. También recordó que la cantante puso la tragedia de los desplazados de Colombia en la agenda internacional.
Colombia está en medio de un proceso de paz impulsado por el presidente Juan Manuel Santos, pero ha habido un recrudecimiento de los ataques de la guerrilla. ¿Cuál es el sentir de los colombianos con respecto a eso?
Muchos apostamos por ese proceso de paz. Es una posibilidad para que las nuevas generaciones piensen en un país diferente. Pero no podemos negar que estamos todavía en una guerra. Lo vemos con los últimos atentados que ha habido en las últimas tres semanas. Eso ha frenado el diálogo. La polarización del país no ayuda. Para los colombianos está claro que la negociación en Cuba no va a dar como resultado la paz. Tenemos que construir una nueva Colombia desde la niñez, porque como en todas las guerras hay problemas estructurales. En Colombia el problema ha sido el conflicto por la tierra durante más de 50 años. Por eso surgen las guerrillas, los paramilitares. Todo ha sido en torno a la posesión de la tierra. Hay quienes tienen mucha y quienes no tienen nada. Somos el cuarto país más desigual del mundo.
¿De qué manera afecta el conflicto armado a los niños?
Esto se refleja por ejemplo, en el embarazo adolescente. Esos jóvenes nacieron en guerra y siguen en guerra. Pese a los programas de prevención, lo que quieren dejar es vida. Pero el problema social aumenta. Son adolescentes de 12, 13 años, que engrosan la pobreza y la miseria. Pero también hay muchos niños que quedan huérfanos. Colombia ocupa el segundo lugar en el mundo por el número de desplazados. Es un desplazamiento interno. Pies Descalzos trabaja en las regiones en donde hay más desplazados para ayudarlos a construir nuevas comunidades. El gran problema de estas familias es que no tienen arraigo y no creen ya en un futuro; simplemente están viviendo el día a día. Además, esos niños son generadores de guerra, no conocen otra cosa. Por eso la paz empieza con educación.
¿Como se refleja la violencia en los niños?
En un aula en donde hay un maestro y 40 chicos, es probable que algunos alumnos estén armados. Pierden concentración en la clase pensando en cómo hacerle daño a otro niño. Pies Descalzos crea ambientes saludables que queremos que trasladen los niños a sus casas. Por eso nuestras escuelas son de puertas abiertas, centros de desarrollo comunitario abiertos las 24 horas, no sólo para que el niño y sus papás estudien, sino para que también tengan espacios en donde empiecen a construir un tejido social. Cada niño y cada niña cree que el que está sentado al lado es un enemigo, que podría ser de la guerrilla o de los paramilitares. Lo primero es construir tejidos sociales que logren despertar confianza.
¿Cómo trabaja Pies Descalzos en las escuelas?
Construimos escuelas públicas conjuntamente con el gobierno nacional, que luego entregamos a los gobiernos porque ésta es una responsabilidad del Estado. Pies Descalzos es un apoyo.Trabajamos en la educación pública ayudando a mejorar las propuestas pedagógicas de las instituciones para que sean coherentes con un entorno de guerra. La escuela es el escenario de participación para las comunidades en donde se capacitan y trabajan en talleres para que entiendan y aprendan a reclamar sus derechos. Aquí esos niños y niñas empiezan la carrera de la vida y para eso hay que ayudarlos desde todas las disciplinas, desde la psicología, la pedagogía y la historia, trabajando con las familias. Lo que nos alegra es que tenemos resultados: niños que logran salir y hablar de lo que fue la guerra y que ahora quieren construir la paz.