Visados siguen distanciando a Rusia y a la UE

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, y el jefe de gobierno ruso, Dmitri Medvedev, reiteraron en Moscú su intención de cooperación bilateral, en un encuentro ensombrecido por la crisis chipriota y especialmente por la cuestión de los visados, que sigue dividiendo a las partes. Hay una serie de posturas diferentes y también algunos problemas, señalaron los dos políticos tras dos días de conversaciones. Pero la cooperación económica entre la UE y Rusia, por ejemplo en el sector energético, se desarrolla positivamente. Sin embargo, para una "cooperación estratégica" bilateral debe suprimirse finalmente la obligación de visado, exigió Medvédev. Barroso, acompañado en Moscú por 15 comisarios europeos, señaló que Bruselas reconoce el objetivo de la abolición de visados entre las partes, pero dijo que aún quedan muchas cuestiones abiertas. Antes había dicho al diario ruso "Kommersant" que Moscú debía demostrar que logró avances en el respeto de los derechos humanos y en la lucha contra el lavado de dinero y la corrupción. Hay movimiento en los planes hacia una facilitación de los visados, dijo Barroso. Pero hay aún cuestiones que aclarar hasta que el documento esté listo para su ratificación. Medvedev dijo que cuenta con la firma próximamente. (dpa)