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Elimina México a pieza clave del caso Ayotzinapa

31 de mayo de 2022

El gobierno de Estados Unidos dio a conocer que México extraditó a ese país a Adán Zenén Casarrubias Salgado, acusado de narcotráfico y pieza clave en el caso de los 43 normalistas desaparecidos. ¿Por qué?

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Imagen: Marco Ugarte/AP Photo/picture alliance

El viernes 27 de mayo de 2022, el Gobierno de Estados Unidos dio a conocer la extradición a ese país de Adán Zenén Casarrubias Salgado, alias "El Tomate”, "Silver” o "Star”, acusado de ser integrante de un grupo de tráfico de drogas que operaba en Chicago. Se trata de la organización bautizada como Guerreros Unidos, una célula del Cartel de los Beltrán Leyva que, desde hace décadas, ha sido un grupo hegemónico en la producción y trasiego de drogas en Guerrero, estado donde ocurrió la desaparición de los 43 estudiantes aquella fatídica noche del 26 de septiembre de 2014 durante el gobierno de Enrique Peña Nieto.

Lo extraño de la acción tomada por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador es que Adán Casarrubias es pieza clave para resolver el caso de los estudiantes desaparecidos en Iguala, Guerrero. Y no sólo eso, también es una pieza clave para entender las redes de corrupción establecida por dicha célula criminal y sus mandos superiores, con el Ejército mexicano y la base de la Policía Federal en Guerrero, entonces encabezada por Omar García Harfuch, actualmente Director de la Secretaría de Protección Ciudadana de la Ciudad de México, y uno de los hombres de mayor confianza de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum.

La información clave que "El Tomate” tiene de los hechos ocurridos en Iguala lo muestran las grabaciones de comunicaciones interceptadas por la Agencia Antidrogas (DEA) antes, durante y después de la desaparición de los normalistas, mientras seguían en Chicago a Pablo Vega-Cuevas, "El Transformer”, socio de "El Tomate”, y otros.

El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), enviado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ha realizado desde 2015 su propia investigación, enfrentando los constantes obstáculos del Gobierno de México. En su tercer informe, presentado en febrero pasado, afirmó que entender las dinámicas de las operaciones de Guerreros Unidos en Chicago era muy importante en el caso, así como el análisis de las interceptaciones hechas por la DEA.

Si "El Tomate” era parte importante de esas operaciones y puede dar información de quienes operaban en Iguala esa noche, ¿quién era su mando superior, y quiénes los protegían en el trasiego de drogas? ¿Por qué el gobierno de México lo entregó a Estados Unidos?

He investigado el caso de los normalistas desde 2014. Fui la primera en documentar y revelar desde 2014 la presencia y participación activa de la Policía Federal y el Ejército, la vigilancia hecha a los normalistas desde días antes del ataque, y descubrí la complicidad de dichas corporaciones con el Cartel de los Beltrán Leyva y sus células en Guerrero.

En una breve llamada telefónica con Vidulfo Rosales, abogado representante de las familias de los 43 estudiantes desaparecidos, este afirmó que el gobierno de México nunca les informó ni consultó sobre la extradición de Adán Casarrubias. Y aseguró que en la reunión que tendrían el 31 de mayo con el gobierno de AMLO preguntarían al respecto.

La extradición, dijo Rosales, "es un obstáculo más para encontrar la verdad, siguen habiendo intereses para que la verdad no se conozca”. Y señaló que los padres de familia han encontrado trabas y retrasos por parte del gobierno actual -al igual que ocurrió con el de Peña Nieto- para descubrir y castigar a todos los responsables.

La extradición de "El Tomate” es contraproducente para encontrar la verdad en el ataque contra los estudiantes y su desaparición. Con esta acción el gobierno de México parece una vez más renunciar a la búsqueda de la verdad en el caso ¿Por qué?. ¿Cuáles pueden ser las consecuencias explosivas de la extradición de Adán Casarrubias para la llamada Cuarta Transformación?

La periodista mexicana Anabel Hernández.
La periodista mexicana Anabel Hernández.Imagen: DW/R. Oberhammer

"El Tomate”, pieza clave

Adán Casarrubias es miembro de un clan familiar en el que algunos de sus hermanos se han dedicad, junto con él, en diferentes épocas, a la actividad de narcotráfico: Mario, José Angel y Sidronio Casarrubias. Hasta donde se tiene registro documental de diversas cortes federales de EE. UU., de las cuales tengo copia, Adán y Sidronio habían vivido durante un periodo en ese país y enfrentaron cargos por narcotráfico y/o lavado de dinero proveniente del narcotráfico entre los años 1992 y 1999.

En 1999 Adán Casarrubias fue arrestado en Illinois acusado de lavado de dinero proveniente de tráfico de drogas en Texas, a donde fue transferido a una Corte Federal.  "El Tomate” era parte de un esquema criminal de al menos 8 personas. Ahí llegó a un acuerdo de culpabilidad con la fiscalía, y gracias a eso tuvo una baja condena de apenas 21 meses de prisión. Ya libre, volvió a las actividades criminales en territorio mexicano.

En 1992 en el distrito de Montana se abrió un proceso criminal contra Sidronio y fue sentenciado en 2005. Según me narró su madre en una entrevista que me dio en 2014, Sidronio acababa de cumplir su condena y llegó a México pocos meses antes de que ocurriera la desaparición de los normalistas. Fue detenido arbitrariamente en Toluca, y la Policía Federal que lo detuvo, de acuerdo a los documentos judiciales, alteró la hora, el día y la circunstancia de su arresto. Y de acuerdo a una carta que el propio Sidronio escribió, de la cual tengo copia, fue brutalmente torturado por la PF, con la tolerancia de la Procuraduría General de la República para inculparse e inculpar a otros de la desaparición, pero nunca se le preguntó ni se le permitió hablar de la participación y/o complicidad de funcionarios federales.

Lo más irregular es que, aunque entre las pertenencias de Sidronio se le encontró una libreta con contactos clave, en la que figuraba el nombre de  Omar García Harfuch, entonces coordinador de la base de la PF en Guerrero, ni el gobierno de Peña Nieto ni el gobierno de AMLO han investigado esa pista.

Meses antes, a principios de 2014, su hermano Mario había sido arrestado en México acusado de narcotráfico. Estaba en la cárcel cuando ocurrieron los hechos de Ayoztinapa.

Quienes sí estaban activos en el narcotráfico, de acuerdo a un expediente abierto en la Corte de Distrito Norte de Illinois del cual tengo copia, eran Adán y su hermano José Ángel.

Adán Casarrubias en la noche de Iguala

Las comunicaciones de BlackBerry interceptadas por la DEA en Chicago antes, durante y después de la desaparición de los estudiantes son consideradas por la Comisión de la Verdad creada por el gobierno de AMLO como importantes y confiables, tal es así que la propia Fiscalía General de la República las ha presentado en diversas ocasiones como prueba ante instancias judiciales. ¿Por qué entonces extraditaron a Adán Casarrubias en vez de buscar hacer justicia?

De acuerdo al expediente judicial en Chicago, las interceptaciones comenzaron desde abril de 2014 y terminaron en octubre de ese mismo año. Tengo los cientos de hojas donde están transcritas de las llamadas registradas entre el 24 de septiembre -dos días antes de la desaparición-, hasta octubre.

De acuerdo con el contenido de los mensajes, hay diálogos entre una célula criminal asentada en Illinois, comandada por Pablo Vega-Cuevas, alias "El Transformer”, y los hermanos Casarrubias, Adán y José Ángel, quienes operaban en México. En las interceptaciones, Adán tiene el apodo de "El Tomate”, "Star” o "Silver”, y José Ángel es "Soldado del amor”. Asimismo, aparecen cerca de una decena de otras claves de personas, entre cómplices de Vega en EE: UU. y cómplices de Adán en México.

Según los cientos de páginas el grupo criminal, se encontraba haciendo una operación de tráfico de drogas cuyo destino era Illinois. La droga vendría de Guerrero para ser distribuida y vendida en EE. UU. El contenido revela que Guerreros Unidos no es una grande y poderosa organización criminal, y que incluso tenían problemas financieros.

Protestas en Ciudad de México por los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos.
Protestas en Ciudad de México por los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos.Imagen: Henry Romero/Reuters

También revelan que Adán y José Ángel Casarrubias a su vez tenían un jefe en México a quien rendían cuentas, pero ni en las interceptaciones ni en el expediente judicial en Chicago se revela el nombre de ese mando superior. Solo se lo identifica como "Guess”, y es la droga de este personaje la que los hermanos Casarrubias iban a mover, y quien la iba a recibir en EE. UU. era Pablo Vega.

Se lee que están coordinando la carga y transporte de paquetes de droga cuando, el día 27, "Soldado del amor” comunica a su hermano "Silver” que algo pasó en Iguala. No voy a transcribir todo lo que se dice en esa columna, pero lo que es claro es que ellos tampoco entienden muy bien lo que sucede. "Soldado del amor” dice que se les metieron los contras con los "ayotzinapos”, pero la información que intercambian es confusa o errónea, y se comunican para investigar más lo que pasó.

Hablan de 60 "paquetes guardados”. Muchos han dicho que se trata de los estudiantes, pero también es posible que se tratara de los paquetes de droga de "Guess”, porque iban a traficar "64” según las interceptaciones del día 25.

Como las comunicaciones fueron en español y la DEA las tradujo al inglés, y luego de nuevo al español, es muy probable que haya palabras equivocadas. Quien puede atar los cabos sueltos es Adán.

Aún así, es claro que los Casarrubias y sus cómplices hablan de contactos con autoridades locales y federales. Los días 27 y 28 de septiembre se quejan de un servidor público al que llaman "Omarcito” y "Omar”. Afirman que quiere extorsionarlos y pedirles más dinero para darles protección. El nombre y teléfono privado de Omar García Harfuch fue encontrado en una libreta de Sidronio en 2014.

En las grabaciones queda claro que el mando sobre los Casarrubias  es "Guess” y que está dando instrucciones. Sólo le interesa su droga.

Con esas grabaciones, la Comisión de la Verdad quiso incriminar a Gildardo López Astudillo ante un juez. Lo extraño es que aunque Adán fue arrestado por la Policía Federal y el Ejército desde octubre de 2015 nunca fue vinculado al caso de los estudiantes, ni siquiera después de que el gobierno de EE. UU. envió las transcripciones.

Aunque no es claro si Adán participó en la desaparición, sí queda claro que participó en el contexto criminal que derivó en ésta, y que sabe quién es el misterioso "Guess”, "Omarcito”, y muchas de las otras autoridades involucradas.

A pesar de eso, ni la PGR de Peña Nieto, ni la Comisión de la Verdad le imputaron cargos ni de eso ni de narcotráfico, ni de nada, y lo enviaron extraditado a EE. UU. En México queda detenido hasta el momento su hermano José Ángel, arrestado en 2020 sin que el gobierno le pregunte sobre "Omarcito” u otra información importante.

Estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa: todavía no se hace justicia en México.
Estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa: todavía no se hace justicia en México.Imagen: Marco Ugarte/AP Photo/picture alliance

La 4T en riesgo

Adán Casarrubias no será juzgado en EE. UU. por el caso de los 43 estudiantes. Los diez cargos en su contra, de acuerdo al expediente judicial del que tengo copia, son por narcotráfico. Podría recibir una sentencia de cadena perpetua.

Él ya sabe negociar con las fiscalías de Estados Unidos; lo hizo en 1999 con muchos beneficios. Si tiene información precisa sobre la desaparición de los normalistas seguramente la dará, pero lo que es más apetitoso para el Departamento de Justicia es la información que "El Tomate” pueda dar de los servidores públicos involucrados en la red de protección  al narcotráfico, y de su jefe "Guess”: su verdadera identidad  podría ser Martín Villlegas Navarrete, "El elegante”, o Federido Figueroa, hermano del cantante fallecido Joan Sebastian, como lo he señalado en otras colaboraciones.

Entre los funcionarios públicos de los que podría hablar están militares que han sido protegidos por la actual administración de AMLO, como el exsecretario de la Defensa Nacional Salvador Cienfuegos, y militares de alto rango ubicados en Guerrero, a quienes el actual titular de la SEDENA, Luis Cresencio Sandoval, quien fue uno de los hombres de mayor confianza de Cienfuegos en el sexenio pasado, dio nuevos cargos en la actual administración.

Además, Adán Casarrubias podrá hablar de Omar García Harfuch, quien ya aparece en otras indagatorias del gobierno de EE. UU. por presuntos actos de corrupción. Podrá decir por qué  su nombre estaba en la libreta personal de su hermano Sidronio, y si es el mismo "Omarcito” u "Omar” que les estaba pidiendo dinero.

Vidulfo Rosales me afirmó que los familiares de los 43 estudiantes han exigido al gobierno de AMLO investigar a García Harfuch en la desaparición, pero hasta el momento se han negado a hacerlo, y eso molesta y levanta sospechas entre quienes buscan recuperar a sus hijos vivos o muertos.

Si Adán llega a un acuerdo sus revelaciones, estas podrían ser explosivas para el Gobierno de AMLO, su favorita para sucederlo, Claudia Sheinbaum, y el Ejército. Lástima que, una vez más, la luz de una posible justicia no esté en México.