De Facto

La muerte de Muamar al Gadafi a manos de milicianos marca el fin de una era en Libia. Las imágenes truculentas transmitidas por la televisión plantean interrogantes acerca de la forma en que fue ultimado y Amnistía Internacional ya ha demandado que se esclarezcan los hechos. En la esfera política europea, las reacciones reflejaron básicamente la esperanza de que comience ahora una era de democracia en Libia. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, lo formuló así: “Esto marca el fin de una era de despotismo. Pienso que era hora de que acabara, porque el pueblo libio ha sufrido por demasiado tiempo. Tengo hoy la esperanza de que el pueblo libio pueda abrazar la libertad y construir un futuro democrático”.

En término similares se expresó el ministro de Relaciones Exteriores alemán, Guido Westerwelle: “Muamar al Gadafi fue un dictador que no respetó los derechos humanos y libró una sangrienta guerra contra su propio pueblo. Esperamos que, tras décadas de dictadura, los libios puedan abrir un nuevo capítulo, libre y democrático, para su país”.

El fin del terrorismo de ETA

La muerte de Gadafi hizo pasar a segundo plano otra noticia de trascendencia: ETA,

ETA anuncia el fin de la lucha armada.

el último grupo terrorista europeo, anunció el fin de su lucha armada, cumpliendo el pedido formulado días antes en este sentido por una conferencia internacional en San Sebastián.

Más de 800 víctimas cobró el terrorismo de ETA en las últimas 4 décadas y a recordarlas llamaron las autoridades españolas, que se mostraron satisfechas pero también cautelosas al evaluar la declaración del grupo separatista. Además, hubo palabras de gratitud hacia Francia, por su colaboración en la lucha contra el terrorismo etarra.

El retador de Sarkozy

En Francia, entretanto, el Presidente Nicolas Sarkozy no sólo tiene ya un nuevo retoño en la familia, sino también un retador para las elecciones presidenciales del año próximo. El candidato elegido en las primarias del partido socialista fue Francois Hollande, que proyecta así su campaña: ‘‘Me doy cuenta de la preocupación por nuestro futuro: preocupación por el caos financiero, por los excesos de la globalización, los problemas de Europa y los peligros para el medio ambiente. Quiero dejar en claro a nuestra nación que Francia puede e incluso debe encontrar un nuevo proyecto, que le permita vovel a progresar”.

Protestas en Grecia

La preocupación por la crisis del euro, en todo caso, es generalizada. Esta semana,

Disturbios en Atenas.

Europa se mantuvo en vilo ante las divergencias entre País y Berlín en cuanto a los planes de rescate. Y ese fue también el tema de discusión que prevaleció en la despedida del presidente del Banco Central Europeo, Jean-Claude Trichet. La canciller alemana, Angela Merkel, aprovechó la ocasión para aludir a la posibilidad de modificar los tratados europeos: “Si queremos entender la crisis como una oportunidad, si estamos decididos a incrememtar la integración, tenermos que aprovechar realmente la oportunidad de esta crisis y estar dispuesto a actuar de manera rápida y también poco convencional. Por eso, para mí la modificación de los tratados no es un tabú”.

Y mientras en Europa se discutía, Grecia se veía paralizada por una huelga general y masivas protestas, en las que hubo también disturbios. La gente que está harta, como lo expuso un manifestante: “Los políticos deben irse. Creo que estamos viendo las mayores manfiestaciones de la historia. El gobierno debe renunciar. Yo voté por ellos, pero éste ya no es un partido socialista....¡Esto es algo sin precedentes en Grecia!”

Pese a todas las protestas, el Parlamento griego aprobó el severo programa de ajuste.

Autora: Emilia Rojas

Editor: José Ospina